Capítulo 2: "La convocatoria"

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Ya había pasado tres meses del fatídico día, la jovencita pelinegra iba como todos los días a la comisaría para saber si había algún avance en la investigación sobre la muerte de su hermano.

Señorita Ox lamento informarle que aún no hemos podido hallar al o los culpables de la muerte de su hermano y creo que será imposible encontrarlo, si no hallamos algo en un mes más lamento decirle que archivaremos el caso, decía un hombre moreno, alto y robusto.

¿Pero porqué?, es su trabajo, ustedes deben encontrar al responsable de la muerte de mi hermano, él era un buen muchacho no tenía problemas con nadie y mucho menos se quitaría la vida como dijo el dueño de esa casa, él no tenía motivos para hacer algo así, él amaba la vida, respondió la bella pelinegra entre lágrimas.

Lo lamento señorita, pero todos los testigos que dieron sus declaraciones no ayudaron en nada a resolver el caso y créame que en esa casa suceden muchas cosas, pero como los dueños tienen muchísimo dinero les fácil salir impunes de todas las cosas que se les imputa. A menos que...

¿A menos que qué, comisario?, dijo la bella pelinegra.

Escuche que habrá una nueva convocatoria para reclutar jovencitos atractivos y talentoso en esa casa, si tu logras buscarte un contacto entre los nuevos integrantes que pueda hallar las pruebas dentro de esa hermética casa sería genial, agregó el comisario.

Pero, ¿Cómo hallar a alguien?, si yo no vivo en la ciudad y no conozco a nadie de allá se lamentaba la bella joven.

No lo sé preciosa, pero es lo único que se me ocurre para resolver el misterio, añadió el hombre.

La joven después de aquella conversación regreso a su casa en la ciudad de Fri pan.

Padre, eso fue lo que me dijeron, decía con tristeza la bella jovencita, mientras miraba con su padre la televisión.

Hija entonces tendremos que resignarnos a nunca poder hacer pagar al culpable de la muerte de mi hijo, de tu hermano, decía con tristeza el gigantesco hombre.

En eso un comercial de televisión capturo la atención de padre e hija, en este salían dos atractivos jóvenes de cabello negro: uno en forma de flama y otro de cabello alborotado, quienes eran los encargados de hacer la invitación de reclutamiento, luego que una voz daba los requisitos para participar en el mismo.


Si tienes entre 18 a 22 años, te consideras atractivo, fuerte, practicas las artes marciales, te invitamos hacer el próximo integrante de la famosa "Casa Z", donde formamos a los mejores guerreros del mundo, decía una voz.

Ven únete a nosotros y comparte esta gran experiencia, pronunciaban a coro el par de apuestos jóvenes.

 Con letras pequeñas al pie del anuncio salía la fecha y hora del evento.


La bella jovencita miro con atención el anuncio, pero también a los dos muchachos que le llamaron la atención por su increíble atractivo y físico. 

Padre, dijo la joven de repente.

¿Qué pasa hija?, dijo el gigantesco hombre preocupado.

Voy a participar.

No puedes hija en esa casa solo admiten hombres no mujeres princesa, le dijo cariñosamente su padre.

Lo sé papá, pero si para encontrar al culpable tengo que hacerme pasar por hombre lo haré, dijo con determinación ante la atenta mirada de su padre.

Después de una larga conversación entre padre e hija y de lograr convencer a su padre de que acepte tan descabellada idea decidieron poner en marcha su plan.

2 horas después:

Padre, no te preocupes todo saldrá bien, yo soy fuerte, se artes marciales y no es por vanidosa, pero soy muy buena en ello, físicamente no estoy mal y como hombre seré muy atractivo, dijo la jovencita riendo ante su ocurrencia después de tanto tiempo.

Hay hija, bueno vamos donde Uranai baba, ella nos ayudará con el cambio de imagen, respondió el hombre regordete mientras ingresaban a un lugar que se encontraba muy oculto dentro de la ciudad.

Con que ella es tu hija, es muy bella, decía una pequeña mujer madura y regordeta mientras se acercaba a cogerle el cabello a pelinegra. Tienes un cabello muy lindo, será una pena cortarlo agregó.

¿Y no hay otra forma de evitar cortarle el cabello?, pronunció preocupado el gigantesco hombre.

Bueno puede usar el pelo largo y pintarlo pero el problema es su rostro tiene rasgos muy finos y por ello es mejor que lleve pelo corto, una peluca elaborada con cabello natural puede ser una opción, pero ella va a combatir y si en uno de los ataques el contrincante le coge del cabello y...

Señora haga lo que tiene que hacer, córteme el cabello y píntelo, no quiero tener algún tipo de inconveniente para lograr entrar a esa casa, además el dueño de esa casa así como alguno de sus integrantes estuvieron en el entierro de mi hermano y no quiero que me vayan a reconocer, añadió Milk.

Vaya eres una jovencita no solo bella sino además muy valiente, dijo la anciana mujer mientras tomaba las tijeras y empezaba a cortar los hermosos cabellos de la pelinegra, cuyos mechones caían uno a uno al suelo ante la mirada de su padre y de la jovencita.

Milk, se vio frente al espejo su cabello estaba muy corto y algo alborotado, la anciana decidió hacerle ese corte con la cabellera alborotada para darle un poco de volumen a su fino rostro.

Ahora pintare tu cabello, ¿Qué te parece rubio?, acotó la anciana.

Lo que usted diga señora, dijo con amabilidad la bella jovencita.

La mujer le pinto el cabello dejando las puntas del mismo totalmente alborotadas, luego procedió a pintarle las cejas y pestañas con un tinte del mismo color pero que no causaba daño a los ojos y le coloco unos lentes de contacto azules, explicándole el cuidado que debería de tener con los mismos. 

Ya estas querida, cada 15 días tienes que venir para que yo te dé el cuidado apropiado de cabello, pestañas y cejas, le dijo la anciana mientras la joven veía asombrada su rostro frente a un espejo.

Mi niña pronunció el gigantesco hombre mientras abrazaba a su hija.

Padre ahora vamos por ropa apropiada, dijo la bella jovencita que ahora por el look que llevaba parecía un atractivo muchachito.

Al día siguiente:

En las afueras de un famoso centro comercial, cuatro jovencitos lamentaban su mala suerte.

A estas horas debería seguir dormido, no perdiendo el tiempo aquí, se quejaba un joven de cabello negro ligeramente alborotado.

Goten ni te quejes que por tu culpa a mí también me enviaron a estas tontas inscripciones, se lamentaba el joven de cabello lila.

Trunks, Goten dejen de quejarse si fuera un casting de chicas ustedes serían los primeros en apuntarse, pero como es para elegir a los próximos miembros de la casa...

Tú lo has dicho Gohan ¿porqué siempre agarrarse con los más chicos?, ¿porqué no enviaron a Vegueta, Túrles, Piccolo?, se quejaba el joven de cabello negro.

Ya chicos cálmense, decía con una adorable sonrisa un joven de cabello alborotado. Solo será por unas horas, luego podrán hacer lo que quieran, les darán el día libre, agregó.

Al fin una buena noticia, dijo el joven de cabello lila.

Ya están entrando, pronunció el joven de cabello negro y cara tierna.

2 horas después

¿Tú nombre por favor?, decía el joven de cabello negro alborotado mientras registraba en unas hojas al nuevo postulante.

Brolius, respondió, con la voz más grave que pudo, la bella jovencita que se hacía pasar por hombre dentro de un muy holgado traje de batalla.

¿Brolius?, dijo el joven de cabellera alborotada levantando la vista para ver el rostro de tan particular nombre.

EN BUSCA DE LA VERDADDonde viven las historias. Descúbrelo ahora