Capitulo 4: Lienzo

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«Rya P.O.V»
Caminaba de regreso a casa luego de un día agotador. Maldito momento en el que decidí seguir mis estudios secundarios. Tome un respiro y recordé al chico de la clase. Lo había dejado plantado y nisiquiera se inmutó. ¿Debía llevarle algo como muestra de arrepentimiento? Con esa idea en mente me desvíe al centro comercial. Entre a varias tiendas pero o era muy caro o no era lo suficientemente bueno. Al final de decidí por una caja de chocolates artesanales. ¿A quién no le gustaban los chocolates? Tome la caja y la pague. La guarde en mi bulto y me dirigí al trabajo temprano, ayer ya me había llevado un buen regalo y no podía perderlo. Entre a la cafetería donde trabajaba y tome mi uniforme. Hoy me tocaba cerrar el negocio así que cuando dieron las 12 am ya sin clientes me dispuse a limpiar. Pero ya terminando escuche a alguien entrar a la tienda. Me v
iré para decirle que estaba cerrado, pero me sorprendió lo que vi. Ramsay el chico nuevo estaba detrás de mi. Me acerqué y le pregunté - ¿Estás bien?- el me miró y asintió -Quiero un café por favor.- le guíe a un taburete adentro del mostrador y hice dos tazas y termine haciéndole un dibujo, eso siempre alegra el corazón. -La casa invita.- dije mientras ponía en la mesa el café junto a un rollo de canela. - Gracias...- Me quedé observandolo fijamente era alto, bastante delgado pero fuerte. Sus ojos eran azul eléctrico pero así sin mas, no destellaban ningún tipo de emoción sólo una profunda seriedad. -¿Ya estabas por cerrar verdad?- me pregunto - Si ya estaba por cerra pero no te preocupes no es una molestia.- El me miro, asintió.- Entonces vamos te llevo tu casa.- Lo mire sorprendida mas no objete. Me daba la impresión de que si lo hacía algo malo iba a pasar. - Claro deja y cierro todo.- Salimos de la cafetería y me dispuse a seguirlo hasta una motora. Mierda con el miedo que le tengo a la velocidad. Me pidió que me montara primero y me puso el casco. - ¿Y tú no vas a llevar casco?- Por primera vez en todo lo que llevaba de día sonrió fue casi imperceptible pero lo hizo. -No tengo miedo a morir.- Con eso último se trepó en la motora. Arrancó a toda velocidad y yo por inercia me apreté a él. Anduve todo el camino incrustada en su espalda. Cuando por fin llegamos al edificio me extrañe. En ningún momento yo le había dicho donde vivía. -Como sábes donde ...- me interrumpió. - Vivo aquí desde hace tres semanas atrás y te he visto salir y entrar varias veces.- Me bajé de la motora y el arrancó supongo que a dejarla estacionada en un multiplicado. Me decidí por esperarlo y cuando lo divice me dirigí hacia el. -Que haces afuera aún es tarde y mañana tenemos clase.- dijo le sonreí- No te preocupes sólo te esperaba. El negó con la cabeza y puso una mano en mi espalda para hacerme caminar. Extrañada por su comportamiento nos metimos al elevador y le dije mi piso. Al parar el ascensor me bajé pero para mi sorpresa el me siguio. Sin darle importancia lo seguí caminando hasta mi puerta y me detuve en la puerta para abrir con el a mis espaldas. Justo cuando me disponía a entrar me detuvo pero no dijo nada. - pasa algo- Le dije calmada de espalda a el. Ramsay se acercó a mi violando todo respeto a mi distancia personal y dijo. - Mañana temprano Rya, espero que no llegues tarde.- Con esas palabras se fue por el pasillo dejándome muy estupefacta.

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