Mi mirada se centró en él, era un chico muy atractivo, tanto para que llamase mi atención y esa atención no la llama cualquier hombre,lucía físicamente bien, cuerpo fornido y todo el rollo, ya estaba pensando en boberías pero no podía dejar de examinarlo, cabello castaño, por cierto lo tenía algo despeinado, eso le daba un toque o aspecto de chico rebelde y eso captó aún más mi atención, ojos color avellana, no es el típico rubio, ojos claros que llama la atención, este tipo era un adonis y sin exagerar, el chico interrumpió mi análisis preguntándome:
- Interrumpo?- Soltando una risa picarona, e hice un ademán señalando a mi alrededor, demostrando que no estaba haciendo absolutamente nada, sonreí y le contesté con un tono algo sarcástico
– pues claro que sí, interrumpiste mi fiesta mental no ves?-, el soltó una risa burlona y de nuevo me hizo una pregunta
-¿Puedo sentarme?, mientras señalaba una de las sillas que estaba frente a mí.
-adelante, ya me iba- contesté, no sé porque dije semejante estupidez, no suelo ser arisca o grosera con las personas que no conozco, es más trato de ser amable.
Aquella respuesta hizo que el chico frunciera el ceño, pero tomó asiento y se me quedó viendo con una mirada que solo reflejaba curiosidad, supongo yo que era porque tenía la porta suero rodante a mi lado y no solo eso, yo tenía varias cicatrices a raíz del accidente, interrumpió mis pensamientos una vez más y me dijo:
-Disculpa, no me he presentado, me llamo Marc... Marc Márquez
- Patricia Kanzler, contesté con un tono desinteresado y mostrándole una sonrisa falsa
Pasaron unos segundos para que yo reaccionara, ¡Espera! ¿Que el piloto de Motogp?, ¿Marc Márquez?, ¿acaso esto es una cámara oculta? no puede ser... ¿qué hace este tipo aquí?, no me lo creo, luce realmente diferente en persona, o es que yo estoy acostumbrada a verle por la televisión con el mono?, solo estas cosas me suceden a mí, creo que en el peor momento me lo tope, no actuaré como una cría porque no me interesa para mi es una persona común y corriente, no actuare como una fanática pidiéndole una foto, autógrafo o lo que sea, porque realmente yo no soy una fanática simplemente me parecía un piloto más, solo que atractivo además que tenía mi misma edad según lo que me había dicho André, claro él era el culpable, si me lo metía por los ojos, ahora que recuerdo mi hermano me había rogado millones de veces para que yo le pagara el pasaje para que viniera a visitarme a España y así el poder asistir a alguna carrera, pero se lo negué muchas veces porque él tenía que terminar su bachillerato, además estaba ya estaba cursando el último año, le asegure que cuando terminaba la preparatoria, podía estudiar lo que quisiera acá en España que yo me haría responsable de él.
Marc me observaba, supongo que no sabía qué más decir ante mí cortante respuesta, pero al parecer este chico no se podía quedar callado y como para romper el silencio dijo:
- ¿No te tomarás tu licuado?, mira que es malo tirar la comida.
Lo que me faltaba... una conciencia alimenticia andante
- Sí, claro no lo desperdiciaré, no acostumbro a tirar comida
- ¿Tienes mucho tiempo aquí?
Alcé una ceja, Claro... ahora quiere saber sobre mí, no se imagina que literalmente vivo acá, gracias al camionero ebrio que tentó con mi vida aquella tarde.
- Digamos que llevo muchísimo tiempo aquí, ¿y tú? ¿Te ha pasado algo?, interrogué yo, claro que quería saber qué hacía él precisamente en el mismo hospital que yo.
- Que es mucho tiempo para ti?, y si he tenido un accidente, me he fracturado el quinto metacarpiano de la mano izquierda, el dedo meñique... dijo para aclarar y continuó; en una caída mientras entrenaba en la bicicleta de montaña y vine a la revisión de los puntos, dijo mientras me mostraba la muñeca vendada.
- ¡Que fuerte! No es muy común ver ese tipo de fracturas supongo. – y contestando tu pregunta, estoy acá internada desde Agosto, o sea casi cinco meses, estoy loca por salir corriendo de acá, espero con ansias que me den el alta ,dije con un tono cansado y realmente estaba cansada de estar en el Dexeus. Lo miré y tenía una media sonrisa, creo que era por mi expresión ante su fractura, le parecía gracioso. Marc replicó
- Tienes razón no es muy común que digamos, disculpa que te haga demasiadas preguntas, pero tu acento no es de acá, no eres española ¿cierto?
- Así es, soy Colombiana, sonreí ante dicha pregunta
- ¿Colombia? vienes de muy lejos, expresó sorprendido,- ahora que recuerdo tengo un amigo colombiano, lo más probable que sepas quién es.
Pues no sé si refería a Yonny Hernández, o tal vez sea otra persona, digo no somos los únicos colombianos en Europa.
- Yonny Hernández, dijo como si me estuviese respondiendo casi como si me hubiese leído la mente -debo suponer que sabes quién es, ya que él es el único piloto colombiano en la categoría reina.
- Sé quién es, por mucha coincidencia es amigo de mi hermano, comparten la pasión por las motos, entre otras cosas, definitivamente que el mundo da demasiadas vueltas...
Marc se reía y no sabía la razón, pero me le he quedado mirando fijamente con la mirada más seria que podía poner.
- ¿Sabes? Por andar buscándote tema de conversación, se me había olvidado decirte que tienes una linda sudadera, me encanta el número noventa y tres-. Y en esos instantes se le dibuja una sonrisa en el rostro que hace sus ojos se achiquen
- Lo que me faltaba Míster Márquez... me la ha obsequiado mi hermano casualmente, admira mucho la manera en que andas con la moto, no podría decir más de eso porque no se mucho de motos pero estoy casi segura que es por eso y no por otra cosa-, dije riéndome, su comentario me sonrojó, Obvio no le diría que me la ha regalado porque las pocas veces que podía ver las carreras con él, le decía que Marc era el que me parecía más atractivo, entre todos y bufé
- Permíteme decirte que te luce bien-. Y yo ruedo los ojos ante sí se puede decir su "halago".
En esos instantes aparece mi enfermera haciéndome señas de que se ha acabado mi break que era hora de volver a mi habitación. Me pongo de pie y Marc me observa extrañado, le explico que me tengo que retirar a mi habitación y él me dice que si quiero me acompaña o que al menos podía darle el número de mi habitación para cuando viniese de nuevo a que le retiraran los puntos, ir a visitarme, me confiesa que le agradé y honestamente no sé porque, si me comporte como una odiosa, aunque no suelo ser así con la gente, pero bueno, dado esto le doy el número de mi habitación y me despido.
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360 Grados
FanfictionMi vida ha dado un giro de trescientos sesenta grados, a raíz de un aparatoso accidente automovilístico. Un giro inesperado. ¿Los cambios se dan para bien, o para mal?