Sus nombres eran John Simon Ritchie y Nancy Laura Spungen, pero para los restos serán siempre Sid Vicious y Nancy, Sid y Nancy: el bajista de Sex Pistols y su novia, la groupie más punki del mítico grupo inglés.
Los dos llevaron a la práctica el fatídico lema de aquellos años, "vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver", y por el camino vivieron once meses de relación entre dosis de jaco, furibundas peleas, giras musicales desenfrenadas y siniestros pactos de suicidio.