DIVINE H.S #1

1.22

Han pasado dos horas desde que Cecil se fue a Atlanta sola, al principio se molestó conmigo pero después comprendió todo.

Y me hizo decirlo en voz alta, Estoy enamorada de Harry.

Ahora mismo estamos en mi habitación acostados en el colchón frente a frente, él no ha dejado de tocar mi rostro y mis labios no han parado de ser presionados por los suyos.

Lo he perdonado, sé que no debería y que en cualquier otra circunstancia o con cualquier otra persona no lo haría. Pero es el, es ese hombre que nunca creí que llegaría a mi vida y sé que sueno demasiado típica adolescente pero realmente estoy flotando, la sensación es tan abrumadora que me siento sin control.

Estoy enamorada por primera vez en la vida, él es mi primer amor y aunque me ama no se siente tan gratificante porque yo no fui su primera mujer, pero tal vez puedo ser la última.

-¿En serio dejarás a Lena?- Pregunto después de que el deja de besar mis labios, he perdido la cuenta de cuantos besos me ha dado.

-Lo haré- Dice ahora tomando mi mano con la suya, mientras que juega con mis dedos.

-Y después tú y yo nos iremos lejos- Dice.

-¿A dónde iremos?-

-Bueno estas por cumplir 18 lo cual lo facilita ya que no incumpliremos la ley, nos iremos a donde tú quieras- Dice y levanta mi mano a sus labios para besarme los nudillos.

-¿A París?-

-¡Claro!-

-Siempre he soñado con vivir ahí y tener algún lugar para pintar- Digo dejando caer mis sueños de mis labios.

-Lo haremos, te lo juro- Dice.

-¿Dónde está Lena?- Pregunto, ya que es bastante extraño que no esté rondando por la casa con lo metiche que es.

-Le dije que me iría a un viaje de negocios, entonces ella decidió irse a Italia a ver a una amiga, pero la realidad es que no me quería mover de aquí por si regresabas-

Entonces su rostro se distorsiona con dolor y se acerca a mí para abrazarme otra vez, esconde su rostro en mi cuello y lo besa con ansiedad.

-No sabes cómo me puse cuando no regresaste la primera noche. Realmente creí que algo te había pasado, busqué por todos los hospitales y llamé a todas las estaciones de policía para saber si había alguna noticia de ti-

-¿No pensaste que tal vez ya no estaba aquí en Manchester? ¿Que regresaría a Atlanta?-

-Lo hice, pero no quería creer que me abandonarías- Dice sacando su rostro de la cuenca de mi cuello para mirarme a los ojos.

-Iba a hacerlo- Digo para aclararlo.

-No, yo nunca te volveré a dar un motivo para que quieras irte de mi lado-

-Eso espero-

***************

-¡Buenos días bebé!- La voz de Harry interrumpe mi sueño y despierto al instante.

-¡Hey!- Digo tallándome los ojos y trato de espabilarme.

Me siento en el colchón y veo a Harry en el marco de la puerta con una charola.

Ha traído dos platos con huevo y bacon, uno con frutos rojos rociados de miel y crema, y otro con salmón y aguacate. También trae consigo dos copas con jugo de naranja y pequeñas rebanadas de pan tostado untadas con mantequilla.

Todo se ve delicioso y mi apetito se intensifica.

-¡Se ve delicioso!- Digo expresando mi agrado hacia los alimentos.

-¿Y sabes que es lo mejor?- Pregunta acercándose a la cama para dejar la charola con el contenido en un pequeño mueble que hay a lado de mi cama.

Ayer por la noche dormimos juntos en mi habitación ahora mismo él está usando sus boxers negros y una sudadera gris con gorro. Luce tan joven, como un chico del colegio, por otro lado yo estoy en una camisa corta y mis bragas amarillas.

-¿Qué es?- Digo sonriendo y abrazándolo por la cintura cuando se hinca en la cama y roba un pan con mantequilla del plato para luego llevárselo a la boca.

-¡Que lo he hecho para ti!- Dice con la boca llena para luego tragar el bocado y sonríe mostrando toda su dentadura perfecta.

-¡Lo has hecho tú!- Le pregunto con fingido asombro.

-Si señora, yo solito- Dice y se sienta en la cama acercándose a mí para besarme, pero yo soy más rápida porque salto de la cama y voy hacia mi bolsa de viaje, me hico en el piso para buscar mi cepillo de dientes.

-¿Qué estás haciendo?- Pregunta sentado observándome.

-Estoy buscando mi cepillo de dientes-

-Sí sabes que no siempre que nos besemos tendremos buen aliento ¿No?-

-Lo dices porque tú ya te cepillaste los dientes- Digo encontrando el palo rosado y me levanto del suelo para encaminarme al cuarto de baño.

-No tienes que hacerlo conmigo. Yo amo todo de ti, incluso tu aliento matutino o cuando duermes y sudas- Dice haciéndome sonrojar.

-Ug-

-¡¿Qué?! ¡Amo cuando sudas!- Dice riéndose de mí.

-Cállate- Digo riendo y cerrando la puerta.

Me cepillo los dientes energéticamente ya que ayer consumí demasiado alcohol y mi aliento podría matar a alguien, ahora que lo pienso Harry nunca ha tenido mal aliento.

Cuando estoy terminando de enjuagar mi boca entra Harry al cuarto de baño y me abraza por detrás recargando su rostro en mi hombro, lo miro por el espejo y me limpio la barbilla con una pequeña toalla.

-Estaba hablando en serio allá fuera-

-No, no lo haces. Mi aliento era desagradable- Digo.

-No hay nada desagradable en ti Camille- Dice girando mi cuerpo y me carga para sentarme en el lavabo, se coloca entre mis piernas y me besa los labios.

Al principio lo hace con delicadeza para después hacerlo más intenso, su lengua acaricia la mía y sus manos comienzan a levantar mi camisa para después sacarla de mi torso.

Cuando mis pechos quedan sin nada que los cubran el me mira a los ojos y toma mis senos con sus manos, se inclina a mi pecho derecho y lo lame para después succionarlo.

La piel alrededor de mi aureola se comienza a entintar de un rojo intenso igual a sus labios, le quito la sudadera que tiene por la cabeza y comienzo a frotar su estómago firme y sus brazos musculosos.

Después besa mi pecho izquierdo mientras sus manos comienzan a deslizar mis bragas por mis piernas y cuando lo hace levanta su rostro de mis senos para acercarse a mi boca y morderla.

Su mano se hunde entra mis pierna y comienza a frotarme con sus dedos, mis manos por otro lado están en su cabello jalándolo hacia mi para que me bese.

Le acarició por encima de sus boxers.

-Quítatelos- Le digo contra sus labios y lo hace, se separa de mí y se los quita. Ahora los dos estamos desnudos.

Me mira de pies a cabeza y sonríe con excitación.

-Eres tan hermosa- Dice y yo solo me estiró para tomar su mano y acercarlo a mí.

Nos besamos de un modo salvaje, toma su polla y la roza entre mis pliegues para después enterrarse por completo en mí. Se mueve mientras le acarició la espalda y bajo mis manos hasta sus nalgas para enterrar mis dedos en ellas.

-Voy a venirme nena...- Dice jadeando en mi cuello.

Y entonces lo hacemos juntos.

Nota:

Chicas por que no están votando?

Cuando ustedes votan me animan a seguirla!

Espero les guste y disculpen pero soy un asco escribiendo sexo!

Las amo.