Me levante muy tarde porque el despertador no sonó. No desayune por lo que en este preciso momento muero de hambre.
Cuando entró a la cocina de mi trabajo, noto que habían usado mi taza y estoy segura de que es el imbécil de Jared.
Jared es un compañero de trabajo con quien tuve una pequeña aventura, él es el típico chico que tiene la maldita costumbre de llamarte cada dos segundos "nena".
Cuando empecé mi aventurilla con jared, le dejé muy en claro las reglas y acepto. Una noche de diversión y al día siguiente éramos compañeros de trabajo y totalmente libres.
El punto es que el maldito de Jared uso mi taza y no lo había lavado. Por lo que tuve que lavar la estúpida taza y regresar a mi puesto de trabajo.
Cuando pase frente al escritorio de Jared , él me saluda.
-Buen día nena, gracias por la taza-dice con una sonrisa sarcástica.
-Mi buen compañero Jared, la próxima vez uses mi taza, voy a escupir en tu almuerzo. Le digo en un tono muy serio, para que note que no estaba bromeando.
Jared suelta una carcajada, se acomoda la camisa y me dice;
-Estaré esperando que lo hagas nena, mejor vete a trabajar.
Lo dejé hablando solo y me dirigí rápido a mi escritorio.
Cuando me siento, suena la linea interna, estaba al teléfono mi querida jefa "Asley Green", una de las accionistas de la revista y una de las mejores editoras del país. Pero para mi, mi jefa es una gran PERRA. Es la peor jefa del mundo, nunca le gusta nada de lo que hago y siempre pero siempre está de malhumor.
Asley Green es conocida en el ambiente de la moda, tiene mucho dinero y tiene gran influencia en la revista. Su vida personal es un fracaso, dos divorcios y un hijo a quien nunca vi que estudia en el extranjero.
Mi jefa es mi mayor tortura de todos los días, y hay más. En su vocabulario no existen las palabras: Gracias, por favor, permiso y disculpe.
Bueno, eso fue una descripción de ella, la Sra Green.
Cuando contesto el teléfono ella responde:
-Emma, ¿dónde estabas? , te necesito urgente en mi oficina - lo dice en un tono histérico y cuelga el teléfono.
¡Oh mierda!, me acomodo la ropa y me encaminó hacía su oficina.
Golpeó la puerta y espero hasta que me diga que puedo pasar.
-Buenos días Sra Green, ¿cómo amaneció? , sinceramente no sé porqué le pregunto eso.
-Normal, Emma ¿acaso te pago para que tomes café todo el día?
Maldita sea, no tomo todo el día café.
Juro que hoy voy a escupir en su comida.
Nota mental: Tengo que dejar de lado los escupitajos
-Emma,¿Holaaa?¿Me oyes? o estoy hablando en un idioma que no entiendes.
-Disculpe Sra Green, no volverá a suceder - le digo, mostrando un indicio de sonrisa.
-No me importa, en fin, te llamé porque quiero que vayas al aeropuerto y que recojas a mi hijo. Hoy llega de Italia y no recuerda bien donde queda la oficina- me dice a la par que mira su agenda.
-Entiendo Sra Green, ¿A qué hora llega?
-Llega en una hora aproximadamente, necesito que lo traigas directo aquí, y que el chofer llevé su equipaje a mi casa, ¿entendiste?- me dice, bajando sus lentes a la altura de la nariz.
-Sí sra Green, ya mismo salgo rumbo al aeropuerto.- sin más que decir me giró y salgo de su oficina.
Si hay personas tóxicas en este mundo, ella es una de esas.
Voy al baño me retoco el maquillaje y verificó que todo este en orden.
¡Excelente! , salgo del baño y tomó el ascensor es hora de conocer al niñito de la sra Green.
Tomó un taxi y voy al aeropuerto.
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Prohibido enamorarse.
RomanceEmma se enamoró y no sólo una vez. Confío y termino sufriendo dos terribles decepciones amorosas. Emma decidió ya no enamorarse, pero ¿será posible que mantenga su palabra? ¿Habrá una última oportunidad para el amor en su vida? El amor nos sorprende...