Al cabo de casi una hora, los miembros, habiendo terminado sus propios asuntos personales y recordando nuevamente el juego en el que estaban involucrados, comenzaron a hartarse de esperar a ser descubiertos.
Bajo la mesa de la cocina Jin y Namjoon salieron informalmente, ignorando el barullo y estropicio que habían montado hacía unos segundos. Al menos para la suerte del líder, su hyung ya se sentía totalmente compensado y no tendría que robar ninguna cabeza de cabellera rubia.
Del armario del pasillo también terminaron saliendo los dos integrantes de Busan, uno con una orgullosa sonrisa y otro, varios centímetros más alto, agachando la cabeza tan avergonzado que casi no se notaba la diferencia de altura.
Y por último el par de la bolsa de regalices, quienes se demoraron más en salir, disfrutando de sus primeros besos y roces como pareja.
Pero la sonrisa del todos ellos se desvaneció al encontrar el sofá de la sala aún ocupado, precisamente por la persona que los tendría que estar buscando desde hacía casi dos horas.
- ¿No te has movido de aquí en todo el rato? -preguntó lastimero Taehyung, sintiéndose desganado por ver que su propuesta de juego había fallado por completo gracias a su malhumorado y dormilón hyung.
- No. Cállate y déjame seguir durmiendo, niño.
- Pe-pero...
El pelirosa entreabrió un ojo, mirando a todos los presentes con molestia, y susurró.
- Todos pillados, ahora fuera de aquí.
Y esas sencillas palabras sirvieron para despejar la sala y que el segundo mayor del grupo pudiera seguir con su casi eterna siesta sin espectadores. Mientras tanto, los demás integrantes, se miraron confundidos entre sí, en el fondo nada afectados por que el juego hubiera terminado, pues cada uno de ellos, a pesar de haber perdido, sentía haber ganado el mejor premio que pudiera haber existido.
FIN