THE PERFECT RUN

• C A P 1 •

Salí apurada de casa, ya que iba tarde a clase. Iba por la acera cuando un coche azul, último modelo, desaceleró hacia donde estaba yo. Rodé los ojos.
Una ventanilla bajó y mis suposiciones eran ciertas. Un chico guapo pero engreído me miró con una mueca.

" ¿Quieres que te lleve, Kay-T?" dijo él.

Ese solía ser mi apodo cuando eramos amigos. Eramos. Pasado.

"Primero muerta" respondí y seguí caminando.

"Me encantaría hacer los honores" dijo y pasó rapidamente, rozándo mi brazo con su BMW. Idiota.

Llegué a clase y el resto del día fue tan aburrido como cualquier otro en Whitewood High.
A la hora del almuerzo un alto, fornido y sexy chico se sentó en mi mesa.

"No sabes", me dijo Kyle, el chico sexy, y mi mejor amigo. "Columbia respondió mi solicitud".

Mis ojos se abrieron como platos y bajé el emparedado que tenía en la mano.

"¿Qué te dijeron?" pregunté apresurada.

"No lo sé. No he abierto la carta y por eso irás a YMH a las cuatro hoy".

YMH era nuestro pub favorito.

"¡Aghh! Sabes que no puedo ir. No tengo coche".

"No hay problema, sólo espérame después de entrenamiento y vamos juntos".

Resoplé. No quería esperar tanto, pero asentí.

~

Cuando salí de clases me dirigí a la biblioteca para estudiar un poco mientras eran las cuatro. Luego recogí y me fui a esperar a Kyle fuera del campo de soccer.
Cuando los sudorosos chicos empezaron a salir, busqué a Kyle pero lo más que encontré fue varios chicos silbándome.
Revisé mi celular y tenía tres mensajes de Kyle.

2:38 ~ Katttt me fui temprano :(
3:23 ~ Nos vemos a las 4 igual?!
3:55 ~ Daniel te llevará. Ámame.

Sollocé un poco cuando leí eso. Justo cuando iba a cancelar algo me tocó el hombro, haciéndome saltar.

"No hagas eso, imbécil" dije molesta.

"No seas un dolor en el trasero. ¿Vienes o no?".

Rodé los ojos y lo seguí al BMW azul. Me monté a regañadientes. Pasaron tres minutos muy incómodos y me empecé a hacer un moño con mi cabello.

"¿Tienes novio?" preguntó él.

Lo miré como si hubiera dicho que era un alien. Él miró mi reacción y rodó los ojos.

"Tienes un chupetón" dijo y me señaló el cuello. "Ahí".

Me miré en el espejo y recordé que me había quemado con el alisador de cabello... Eh...

"No te interesa".

Me miró burlón.

"¿Sabes qué no me interesa? Tú. Ni a mí ni a ningún otro ser humano", dijo, carcajeando con malicia.

Abrí la puerta y salí del coche. Daniel sonó el claxon y le saqué el dedo del centro. Prefería caminar de ahí a china que pasar un segundo más con ese bobo.