El error que más Amo

Capitulo 52. Un brindis

Andrea: samuel cada día me sorprende más, me pidió que descubriera un poquito a Elisa, lo que me encontré cuando lo hice me lleno el alma, Elisa llevaba una pijamita rosa claro que tenían unas letras de un rosa más oscuro que decían "mami, aceptarías casarte con mi papi?" Como decirle que no a una petición así y mucho más si se trata del hombre que más amo en esta vida

Samuel: que nos dices amor? aceptarías casarte conmigo? -pregunta nervioso con un anillo precioso en sus manos-

Andrea: samuel... Si sí si acepto -dijo llorando pero feliz-

Samuel se acercó a andrea y la beso con tantas ganas, tenía tanto miedo de que Andrea no lo aceptara

Samuel: te amo te amo -dijo cuando se separó del beso- gracias mi princesa por hacerle la pregunta a mamá -le dijo a su hija para luego dejar un beso en su cabezita- te prometo que dedicare cada día de mi vida a hacerte feliz

Andrea: ya lo soy mi amor, gracias a ti e vivido los mejores momentos de mi vida, haz sabido curar cada uno de mis miedos, gracias a ti se que el amor no es una debilidad, es esfuerza, te amo samuel

Samuel cuidadosamente tomo el dedo de andre para colocarle el anillo, nada pudo haberle salido mejor, oficialmente estaba comprometido con andrea y no había nada ni nadie que lo separe de ella.

Cayetana: cuando llegue del hospital enseguida llame a Leonardo y le dije que andre ya había despertado, ahora eran más de las 7 de la noche y aún no sabía nada de donde estaba el, me setia tan sola, tan mal de no tener a mis hijas, de perderme el crecimiento de mis nietos, hace ya 4 meses que no veo a mi pequeño arturito, será que todos tenían razón, que me equivoque en cuanto a Leonardo... No!! mis hijas fueron la que decidieron cambiarme por esos hombres, yo no puedo seguir sufriendo por esas mala agredecidas, Leonardo me a demostrado lealtad ante todo, no puedo Seguir dudando de la decisión que tome...

Leonardo: Cayetana -entra llamando su atención ya que ella llevaba un buen rato fuera de la realidad-

Cayetana: Leonardo, mi amor, que bueno que viniste, me sentía muy sola -se acerca para besarlo pero ve algo que no le agrado para nada- que es esto Leonardo? -dijo agarrando el cuello de su camisa-

Leonardo: por dios Cayetana, ahora me vas a decir que la vejez también te está dejando ciega? -dice fastidiando-

Cayetana: Leonardo!! -dijo enojada, pero con un profundo dolor en su pecho-

Leonardo: ya Cayetana, no me vengas con reclamos, estaba en una reunión con algunos amigo y entre ellos había mujeres y pues ya una se pasó y eso terminado ahí

Cayetana: y lo dice así tan cínicamente -dijo enojada-

Leonardo: por dios Cayetana!! Mírate, no estas en edad de hacerme escenas de celos, tu aceptaste casarte conmigo, así que ahora no quiero reglamos y mucho menos escenas como estas. Con permiso, estoy muy cansado -se da la vuelta y sube a su habitación dejando a una Cayetana en la sala llorando de rabia-

Todos en estaban reunidos en el rancho alcazar a excepción de andrea y samuel que seguían en el hospital

Irina: quiero hacer un brindis -dijo levantando su copa de vino- quiero brindar por la felicidad de la familia Gallardo del junco que ya está volviendo a la normalidad

Todos: salud -gritaron a la vez-

Flavio: mi muñeca tiene razón, gracias a dios todo esta volviendo a la normalidad, mi cuñada y mi sobrina están en perfecto estado y está familia cada vez está más grande -dijo mirando a don Felipe que aunque se viera feliz, estaba triste por su hija-