Capítulo 9

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Ya habían pasado tres semanas des de que Ashton y Ryan nos habían declarado la guerra de bromas y aún no se habían vengado.

Durante estas dos semanas ya hemos acabado dos veces en el despacho de la directora.

¿Por qué?

Bueno, un chico le pegó un puñetazo a Mark por meterse con Ashton y Ryan, y luego se chivó a la directora de la broma de los coches pintados.

Decidimos vengarnos de ese chico, pero algo fue mal y ahora volvemos a estar en el despacho de la directora.

Aunque ahora que lo pienso, él debe de seguir corriendo desnudo por el campus. Una sonrisa se estampó en mi cara al recordarlo.

- Y bien... Kat, ¿Qué habéis hecho esta vez?- interrogó señalándola para que empezara a explicar.

La verdad es que esta directora me cae bastante bien. Es muy agradable y nos llamaba a todos por nuestros nombres, no por nuestros apellidos ( a diferencia de todos los demás profesores).

-Hmm... Dejamos a un chico desnudo corriendo por el campus- respondió Kat con una sonrisa inocente.

La directora nos miró con los ojos muy abiertos.

-¿Se puede saber por qué?- preguntó atónita.

-Porque me pegó un puñetazo- contestó Mark señalando su ojo morado.

-Y por chivato- continuamos Kat y yo al unísono.

La directora suspiró y negó con la cabeza.

-Vamos a ver, no tengo dudas de que se lo merecía- respondió con un suspiro a lo que nosotros sonreímos- Pero vuestros padres os enviaron aquí principalmente para dejar vuestras venganzas.

Asentimos lentamente.

-Así que no tendré más remedio que imponeros un castigo cumpliendo con la normativa- anunció mientras le daba vueltas a su bolígrafo- Este viernes limpiaréis la cafetería.

Suspiré resignada y asentí, al igual que Mark y Kat.

Salimos de su despacho para volver a clase.

-¿No hemos sido demasiado sinceros?- preguntó Mark, por el hecho de que nos habían castigado.

-Para que mentir- contestó Kat y nos echamos a reír.

Mark se dirigió a su clase y nosotras a la nuestra, ya que nos habían sacado de ellas.

Cuando llegamos, algunos nos miraron mal al ver nuestras sonrisas triunfales.

Me dirigí a mi sitio, al lado de Amber.

-¿Qué tal ha ido?- preguntó susurrando para que el profesor no la escuchara.

-Nos hemos librado- me limité a contestar.

Amber sonrió y su vista volvió a la pizarra.

Al acabar la clase, tocaba química, así que Amber, Kat y yo nos dirigimos al laboratorio.

Como en el laboratorio los asientos estaban distribuidos de tres en tres, nos sentamos las tres juntas.

La clase empezó a llenarse, cuando entraron tres chicas rubias contoneándose.

Eran Brittany, Alisson y Megan.

Brittany era una chica rubia y falsa, mientras que Alisson y Megan solo eran sus clones.

<<Tú y tu prima también sois rubias>>

Sí pero rubias naturales, no teñidas. Y deja de hablar como si no fuésemos la misma persona.

Internado ThompsonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora