Ángeles y Vampiros (Abraham Mateo)

Capítulo 12 parte 1

- ¿Qué rayos estás queriendo decir? - aquí la gente está destinada a confundirme...

- Lo que escuchas -

- Pues fíjate, lo que escucho me confunde -

- Cuando no... - lo dijo en un susurro casi inaudible, pero para su desgracia lo alcancé a escuchar.

- ¿Como dijiste? Mira, yo no tengo la culpa que la gente aquí me diga cosas sin sentido - Dios mío este tipo me saca de quicio.

- Ah, ahora resulta que nosotros somos los confundidos que no saben de que hablan. Te informaré, estamos plenamente capacitados para enseñar y ayudar a otros como nosotros.... - Estaba enojado, se notaba a leguas - Y parece que aquí la señorita no se quiere dejar ayudar con todo lo que le está pasando..-

- Lo único que haces es confundirme maldita sea - listo, explote..

- Pensé que eras diferente y no tan terca -

- Pues fíjate así soy yo, que pena si te decepcioné - lo dejé ahí con la rabia y la palabra en la boca y me fui.

Me dirigí al patio trasero del instituto a cojer un poco de aire, despejarme y poder relajar el dolor de cabeza que regresó cuando estaba discutiendo con Alonso.

Cuando llegué al patio vi a lo lejos un árbol y alguien recostado a este. Me acerque.

Cuando ya sólo estaba a unos centímetros me dijo....

- ¿Qué haces aquí ____ ? - dijo y levantó su cabeza para encontrar su mirada con la mía.

- Sólo vine a despejarme.... Mmm ¿te importa? - dije y señale a un lado de él al suelo. Negó con la cabeza y me senté - y ¿Tú? Que haces aquí - cerró los ojos y suspiró para luego volverlos a abrir

- Sólo aclarando mis ideas - volvió a mirarme y noté algo diferente en su forma de ver

- Abraham que tienes.... me preocupas - lo conozco de hace poco pero siento que lo conociera de hace mucho..

- No te preocupes, pero quiero hacerte una pregunta -

- Adelante -

- ¿Te llevas algo con Alonso? -

- No, nada y espero que se siga quedando así porque hace poco que lo conozco y ya no lo aguanto - soltó una pequeña risita

- Pobre chico, se ganó tu enojo - siguió riendo bajito

- No te rías, pero enserio si me saca de quicio - su mirada es..... no sé describirlo, me siento bien - ¿Por qué preguntaste? -

- Los vi juntos -

- Es mi protector - al estar tan cerca de Abraham sentí que se tensó.

- ¿¡Qué él es qué!? - su reacción me hizo estremecer - esto no es cierto - lo dijo tan bajo que a duras penas logré escuchar.

Se paró de un sólo salto y mi única reacción fue cogerle la mano, él sólo me miró.

- A ¿dónde vas? No me dejes sola - lo solté - ya no importa -

Volvió y se agachó, me agarro de la mano, me levantó del suelo y juntó mi anatomía a la de él y me abrazó.

- Yo jamás te dejaré sola, has que eso te entré en la cabeza, jamás - me susurró al oído, movi mi cabeza en forma de aprobación.

Se alejó un poco de mí y nos miramos a los ojos

- jamás - dicho ésto agarró mis mejillas y me dio un beso en la frente.

- Eres lo único bueno que me a pasado en este instituto -

- ¿Debería sentirme alagado? - negué, él sonrió - ven quiero enseñarte algo y estoy seguro que te va a gustar - sonreí y él igual

- Andando -