Texto 5. "¿Se acabó?"

56 2 0
                                    

No puedo evitar pasarme las horas pensando en ti. Pensando en lo mucho que añoro tus besos, tus caricias. Necesito volver a sentir tus abrazos. Necesito volver a sentir tus labios presionados con los míos. Necesito muchas cosas pero, ante todo, te necesito a ti. No puedo evitar echarte de menos. Recuerdo el día que te vi por primera vez. Recuerdo cuando nos reencontramos y todo lo que hemos pasado. Pero, hoy día, no puedo evitar recordar lo que tuvimos. Recuerdo cada beso, cada caricia, cada abrazo, cada sonrisa. Recuerdo incluso el día que te dije adiós y, lo recuerdo como uno de los días mas tristes de mi vida. Estábamos todos en la estación de trenes y todos comenzamos a abrazarnos. Recuerdo decidir abrazarte el ultimo porque quería disfrutar mis últimos minutos contigo. Abrace a todos y cada uno de los presentes y no derramé lágrimas pero, finalmente, llegaste tu. Era el momento en el que debía abrazarte. Era el momento de decir adiós. Lentamente me puse de puntillas y tu me rodeaste con tus brazos. En se momento noté que no podía retrasarlo más. Las lágrimas empezaron a brotar de mis ojos como si de una cascada de tratase. No podía evitarlo, no quería dejarte. Nos separamos y viste que estaba llorando. Entonces, volviste a abrazarme. Yo sentía que estaba en las nubes pero, a la vez, me sentía mal. Supongo que era porque no quería dejarte. No quería asimilar que era la última vez que te abrazaría en mucho tiempo, por no decir para siempre. En ese momento me miraste a los ojos y me dijiste "Nos veremos pronto" y, yo, con los ojos vidriosos y una sonrisa triste dije "¿Prometido?" y, tu, asentiste sonriente. Nos miramos, nos sonreímos y nos abrazamos por última vez. Y, entramos en el tren. Me senté en el asiento y te vi por la ventana. Estabas sonriendo. Y, en ese momento, me di cuenta de que todos los recuerdos que habiamos vivido iban a pasar a ser eso, recuerdos. El tren comenzó a moverse marcando el fin de los días mas felices de mi vida, marcando el fin de nosotros o, al menos, una larga pausa.

Qué somos, qué fuimos y qué seremosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora