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Capítulo IV
sentí una extraña sensación que recorría todo mi ser....
Era bastante complicado comprender.
Elian salió de la tienda, pero él no sabía que ocurría así que disimulamos que nada había pasado.
Gilbert me lleva a la parada del autobús,se despide de mí y se va.
Pasaron los meses y cada vez esto se tendía a una relación bastante rara.
Yo por mi lado y el por el suyo, a pesar de lo distantes que solíamos ser existía algo aún, que nuestras miradas lo respondía todo.
Llego el mes más esperado diciembre, termino de semestre y unas largas vacaciones de por medió.
Durante estas, todos nos dejaríamos de ver, eso significaba que estaríamos aún más distanciados.
Una reunión en casa de Carolina, en la cual asistiría él, no sabía que iría por qué le avisaron en el momento y Esque es de esas personas que si se les presenta la oportunidad de salir la aprovecha.
Todos reunidos ahí, esa noche no pasó nada la mayoría fueron miradas pero con eso me bastaba para sentirme tranquila.
Llegaron mis padres muy temprano por mi así que tuve que retirarme pronto.
En estas vacaciones ocurrió algo bastante extraño, durante estas me escribía con otro chico todo lo que hablábamos era jugando pero al final creo que nos lo estábamos tomando bastante  enserio.
El chico se llama Cristofer es alto, de complexión muy delgada, test clara, un perfil afilado y un cabello hermoso.
Cristofer se hizo mi compañero de trabajo o quizá mi amigo pues la mayoría de las veces le ayudaba yo con sus tareas, y fue por eso que nos comenzamos a hablar.
Él al principio solía ser muy cariñoso, incluso había cariños y actitudes que me sacaban de onda, pero no le tomaba mucha importancia.
Un día él me pidió que lo acompañara a la escuela, a lo cual yo acerté nos pusimos de acuerdo para vernos al día siguiente y así fue.
Justamente lo vi y él me vio cuando no tardamos mucho en sonreír el del otro lado de la calle y yo por el otro extremo, los carros no nos permitían pasar pero nosotros nos seguimos viendo con esa sonrisa.
Por fin pude cruzar hacia dónde estaba él y caminando íbamos platicando de que si sus vacaciones eran aburridas, de que era lo que hacía,etcétera.
De regreso a casa el me acompañó a un mandado, me sentía extraña por qué éramos amigos e íbamos tomados de la mano.
Y entonces yo le dije
-¿qué clase de amigos se toman de la mano?
Él respondió
-¡nosotros!
Sencillamente comprendí que éramos esa clase de amigos que quizá escondían algo.
Me llevó hasta la casa de mi abuelita pero enseguida se fue.
Y así pasaron los días, hasta que una noche Gilbert se acuerda de mí ,y decide mandarme un mensaje que poco después me molestaría por qué era bastante desagradable pero me pide disculpas.
Solo esa noche hable con él.
Yo comenzaba a sentir algo por Cristofer, pero tenía miedo a que el no sintiese lo mismo por mí.
18 de enero que día tan más esperado.
Entramos de vacaciones nuevamente los volvería a ver a todos, después de ese regreso todo cambio sentí que yo ya no era la misma. pasó lo que tenía que pasar Cristofer se distanciaba de mí, muchas veces me evito de su camino sentía una sensación de tristeza por qué yo me había acostumbrado a él.
Me enteré de algo, él ya tenía novia y decidí  alejarme de Cristofer aunque sí me gustaba mucho.
A Gilbert le deje de hablar, pero como vio que me estaba perdiendo el vino hacia a mí nuevamente.
En verdad Gilbert es así, a veces siento que no me quiere tener a su lado pero tampoco puede dejarme ir.
Es bastante agotador.
Llena mi mente de dudas y cuando decido aclararlas solo logra llenarla más.
Aún sigo confundida.

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