Love For Contract [Camren] - Adaptación

Capitulo 2

«¿Has tomado una decisión?» cuestionó Dinah mientras sujetaba una taza de café, bastante temprano en la mañana.

«No» suspiró la castaña dejándose caer en la mesa.

«¿Por qué estas dudando?»

«Porque soy una prostituta, Dinah. Hay muchas cosas en las que pensar. Algunos clientes van a crear problemas si lo dejo durante un mes. Y además, hay que pensar en el después, si vivo un mes con ella, sin sexo, sin esa relación escort/cliente, ¿cómo haré para comenzar de nuevo? Tú sabes que no hago esto por vocación, será muy difícil recomenzar»

«Lo sé Mila. Pero piensa también que con ese contrato, extraño, te doy la razón, tienes la ocasión de vivir un mes sin hacer todo eso y ganar suficiente dinero para el futuro y poder quizás dejarlo definitivamente. Es una gran oportunidad Camila»

«...»

«Camila, te quiero de verdad y si te digo esto es porque creo que es la mejor solución para ti, lo sabes. Puedes dejar de vender tu cuerpo durante al menos un mes. Camila, veo tu mirada cada que vez que vuelves a casa, sé lo que sientes cada vez que un hombre entra en ti»

«¿Ah sí? ¿Y qué siento?» dijo la castaña con una voz quebradiza.

«Camila, no hagas eso, sabes que no funciona conmigo»

La joven se relaja en seguida y suspiró con exasperación.

«¿Qué siento, Dinah?» dijo calmadamente.

«Te sientes sucia. Lloras en tu cama cuando crees que no te escucho. Sé que eres fuerte Camila, pero sé que estás llegando a tu límite y esta propuesta llega en el mejor momento. Responde a esta pregunta, sin pensar en las consecuencias, ¿qué tienes ganas de hacer en realidad?»

«Decir que sí»

«Entonces, no lo pienses más, lánzate»

Al llegar a la escuela, Camila estaba sobreexcitada esperando ver a Lauren, hablaba con su compañera de piso cuando la vio. La alcaldesa llevaba un traje chaqueta negro, falda muy sexy, camisa blanca de la que había desabotonado algunos botones, ofreciendo una vista discreta y sensual sobre su escote. Camila miró hacia abajo y vio a un muchacho que estaba firmemente agarrado a su brazo. Lauren hablaba con un papá que parecía tirarle los tejos y el niño le lanzaba unas miradas oscuras escondiéndose ligeramente detrás de ella. Camila vio que la alcaldesa se daba cuenta del malestar de su hijo y la vio cortar en seco la conversación para concentrarse en él. Se agachó ante él e inmediatamente el rostro del niño se iluminó, nada más lo alegraba que su madre ante él.

«Buenos días, señora alcaldesa» dijo Camila llegando a su altura

Lauren alzó la mirada y le sonrió sinceramente

«¡Oh, Miss Cabello, qué sorpresa! ¿Qué hace aquí?»

«Mi compañera de piso trabaja aquí, la he acompañado para verla» Camila estaba agradablemente sorprendida. Por lo normal, la gente que conocía su trabajo, se ponían tensa en su presencia y evitaban que la relacionase con ella. Pero la morena estaba tranquila, sonriente y totalmente desinteresada de las miradas de los demás.

«Le presento a mi hijo Michael. Michael te presento a Camila, es una amiga, no tienes que tener miedo, ¿te acuerdas?, te hablé de ella esta mañana. Quizás venga a vivir con nosotros, a la casa, para ayudarme» dijo ella sonriendo y haciendo una señal a Camila para que ella también sonriera.

La joven castaña así lo hizo, comprendiendo que la primera impresión parecía muy importante para el niño.

«Hola Michael, estoy contenta de conocerte» dijo ella con una gran sonrisa poniéndose a su altura.