Estado disponible

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Querido Diario

Hoy definitivamente no fue mi dia, sentí que el mundo se derrumbaba, mi vida no podria haber sido peor hoy, me puse a pensar en lo que ha pasado los ultimos 14 años de mi vida, y me doy cuenta de que no vale la pena estar aqui...

Espero poder tener la fuerza suficiente para volver a escribirte..

Maria

La chica cerró de golpe el pequeño diario, la pasta forrada de terciopelo rojo, con un corazon en una esquina, se le llenaron de lagrimas los ojos casi al instante, no quería saber nada de nadie, ni de ella misma, no tenía el valor suficiente como para hacerlo.

Guardo aquel pequeño libro debajo de su cama, el lugar habitual para ella, se sentó en el suelo esperando a que el tiempo pasara, estaba en su casa, un lugar lleno de luz que siempre la reconfortaba, pero ahora ni siquiera se sentía tranquila. Estaba sola, no había nadie con quien hablar, por lo regular a esas horas, siempre, entraba a messenger o en alguna red para poder platicar, pero su corazón no se lo permitía, sentía que si lo hacía solo se encontraría con problemas, una voz en su cabeza, la incito a hacer el intento.

Abrió su computadora, era modesta, pero lo suficientemente funcional, entro a messenger, y así comenzó todo, no tenia el valor suficiente para hablarle a alguno de sus contactos, pero de entre tantos, unos cuantos comenzaron con el típico "hola", ella contestaba con la misma palabra y así se desencadenaba una conversación...

Después de unos momentos, Maria se dio cuenta de que no podia seguir hablando con nadie, no en esos momentos, no cuando en la escuela había sacado malas notas, no cuando sentía que ya no tenía amigos, no cuando sus padres se iban y la dejaban a su suerte en la casa.

La chica después de meditar un momento, se levantó de donde estaba y se encerró en su cuarto, se miro al espejo, no veía mas allá de su ropa, ropa que no era cara, pero que le gustaba, colores brillantes y alegres, ahora solo la deprimian...

De momento, escuchó un sonido, era un zumbido en el messenger, se acerco rápidamente solo para escribir con furia:

"No me hables, hay gente que esta ocupada no todo es la computadora"

Cerró la ventana, la cual al instante se volvió a abrir con un mensaje de aquel contacto, una vieja amiga de su anterior colegio...

"lo siento pero tu estado es Disponible, creí que estabas verdaderamente disponible para hablar"

Maria simplemente apagó la computadora, no quería reconocer que su amiga tenía razón...

Se fue hasta la cocina a beber un poco de leche, para luego ir al baño a vomitarla, no podía comer de noche, en una revista había leído que si lo hacia aumentaría una talla, y ella no quería eso, si no podía ser inteligente, ni popular al menos tendría que ser bonita...

Volvió a su cuarto solamente para derrumbarse y llorar.

El diario de una emoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora