Sober |ns

1.Amor, amor, amor

Me encontraba en nuestra habitación. Estaba acostado en nuestra cama, tenia puesta una camiseta blanca de el.
El olor a su colonia entraba a mis fosas nasales, disfrutaba de su olor. Talle mis ojos y me di la vuelta al lado derecho viendo un lugar vació en donde el debía de estar, pero como todos los días estaba ausente.

Me puse de pie, pase las manos por mi cabello tratando de peinarlo un poco. Solté un suspiro, para después adentrarme al baño. Lave mis dientes y moje mi cara, me coloque mis pantalones holgados grises y me dispuse a salir de la habitación hacia la cocina.
Me pare en seco al verlo ahí parado, estaba volteado de espalda. Sus cabellos caían por detrás de sus hombros, eran pequeños mechones de cabello castaño.

Sonreí y me acerque a el con cuidado, lo abrace por detrás.

—Pensé que ya te habías ido al trabajo —Dije, mientras recargaba mi barbilla en el hombro de el.
—Estas equivocado, no me voy aun -Respondió indiferente, mientras se servia una taza de café sin dirigir un segundo su mirada esmeralda hacia mi.

Harry llevo sus manos a las mías, mi corazón se acelero y mi cuerpo se tenso ante su tacto. Pero como la mayoría de las veces el solo saco mis manos de el y se aparto de mi, tomando asiento en una pequeña banca que se encontraba por ahí. 
Suspire y trate de no darle importancia como solia hacerlo. 

—¿Quieres que te haga algo de desayunar, cariño?
—No, así estoy bien —Saco su celular y empezó a teclear en el.
—¿Y que tal si te hago un almuerzo para el trabajo? --Me acerque a el.
—Ya dije que no, así estoy bien —Gruño y siguió con la mirada en su celular.

Un dolor en mi pecho apareció, el que siempre hacia su gran entrada cuando Harry me trataba tan indiferente y no me prestaba atención.
Lo mire molesto por unos minutos pero no pareció percatarse de mi mirada en el. Puse los ojos en blanco y fui hacia la lacena, saque una caja de cereal y un plato.

—Ya me tengo que ir —hablo después de unos minutos y pude escuchar como se ponía de pie.

No respondí y me dirigí hacia el refrigerador, lo abrí y saque el bote de leche.

—Niall, ya me voy —Repitió y sentí como se acercaba hacia mi.

No respondí nada de nuevo, no quería. 

—Bebe... —Me tomo de la cintura y me pego hacia el por detrás. Los latidos de mi corazón se aceleraron y sentí como mis mejillas se calentaban.
—¿Qué? —Respondí, no lo mire.

Harry apretó su agarre e hizo que me volteara haciendo que estuviéramos cara a cara.

—Ya me iré al trabajo —Dijo por tercera vez —Quiero mi beso, bebe —Rozo su nariz con la mía, no pude evitarlo y sonreí.
—Esta bien —No deje de sonreir y lo tome de las mejillas juntando nuestros labios en un beso.
Harry se separo de mi con una gran sonrisa burlona  y tomo su maletín negro.
—Nos vemos en la tarde —Me hizo un guiño y después salio de la casa.

Suspire y me abrace a mi mismo.
Dirigí mi mirada hacia mis pies e hice una mueca. Sabia que con su "Nos vemos en la tarde" se refería a un "Llegare al día siguiente" pero bueno, no podía hacer nada al respecto. Ya me he acostumbrado a aquello estos 2 años que hemos estado juntos.

Sacudí mi cabeza alejando esos pensamientos de mi mente. 

•••

—Vamos, Niall. Yo se que quieres —Zayn suplico e hizo puchero —Anda, ya pide la pizza.
—Son las 11 de la noche, Zayn —Lo mire —No quiero que...
—No quieres que Harry se moleste contigo por usar el dinero que te dio para emergencias. Si, si, lo se —Se quejo y puso los ojos en blanco—Pero esto es una emergencia, me moriré si no como pizza. —Llevo sus manos a su estomago y me miro.
—Ya, bien. Pagaré la estúpida pizza —Reí, saque mi celular y se lo aventé --Pero tu pídela, yo solo pago.

Zayn tomo mi celular con una gran sonrisa en sus labios. Yo solté una carcajada y tome el control de la televisión para así, poder encenderla.
Había llamado a Zayn a eso de las 5 de la tarde, me sentía solo y no quería estarlo. Así que bueno, mi mejor amigo era la única opción que tenia.

—Ya la ordene —Me entrego mi celular y tomo asiento a un lado de mi —Y dime chico, ¿Como van las cosas con tu hombre? —Sonrió  y reí un poco.
—No lo se —Me encogí de hombros —supongo que bien, como siempre.
—Oh, vaya—Me miro —No sabia que tu "como siempre" se refería a que te sigue tratando como una pequeña mierda.
—Ya basta, Zayn —Puse los ojos en blanco —El no me trata como una pequeña mierda —Frunci el ceño—El solo...solo me demuestra su amor de diferente manera.
—Una muy y extraña manera, ¿no crees? —Alzó una ceja.
—Ya cierra la boca —Gruñí y mi estado de animo bajo rápidamente ante sus comentarios.
—Bien, lo siento —Hizo una mueca —Pero ya sabes que pienso de lo que sea que tienen.

Volví a poner los ojos en blanco. El timbre resonó por toda la casa, me puse de pie y me dirigí hacia esta.

—Pero que rápido, pensé que la pizza llegaría mas tarde —Dijo Zayn.

No respondí y me dispuse a abrir la puerta.
Me lleve una gran sorpresa a no ver un repartidor de pizza, en cambio detrás de la puerta se encontraba Harry un tanto ido, se notaba cansado, su cabello estaba todo despeinado y podía ver como se tambaleaba un poco hacia los lados.

—Harry, llegaste —Sonrei y lo tome del brazo.
—Te extrañe tanto hoy en el trabajo, bebe —Dijo bajito, apenas si podía escucharlo.
—¿Te encuentras bien? —Lo acerque hacia mi y lo mire preocupado.
—N-o, no —Soltó un erupto y luego rió —Solo estoy algo pasado de copas, cariño —Volvió a reír.

Sacudí mi cabeza de un lado a otro y tome su mano haciendo que se adentrara con cuidado hacia la casa. Lo lleve a la sala donde se encontraba Zayn con una mirada de confusión al ver a Harry.

Ayude a que se sentara y dirigí mi mirada hacia Zayn.

—Sera mejor que te vayas, dejamos la pizza para después, ¿bien?
—Esta bien, Niall —Me dio un abrazo rápido —Es mejor que los deje solos—Sonrió un poco y saco las llaves de su auto --Nos vemos.

Zayn se dio la vuelta y salio de la casa. 

Voltee hacia Harry y lo mire, se encontraba con los ojos cerrados y su cabeza hacia atrás. Se miraba tan lindo así, tan inocente. Me senté a un lado de el y lo mire por unos minutos, los minutos mas lindos y tranquilos de mi vida.