Tortura

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Los días pasaron, lentos e incontables, la comida era pobre y escasa. Cada vez parecía que llegaba en menos cantidad, por lo que poco a poco se iban consumiendo a sí mismos. Habían perdido peso, los dos, era evidente, sobretodo en el caso de Uri, que debido a encontrarse en peores circunstancias que él después de batallar con el veneno y aun recuperándose de la herida de la pierna, las fuerzas parecían redirigirse únicamente a eso.

El frio calaba sus huesos y una humedad creciente se colaba en el lugar, por lo que según dedujo el caballero el tiempo del planeta o lugar donde estuvieran retenidos, debería estar llegando al invierno. La paciencia no era algo que caracterizase al mayor, se dejó los nudillos numerosas veces contra el metal, para cuando estuvieron de nuevo curados, volver a las andadas golpeando una y otra vez, la puerta.

Nada ocurría, no había contacto, podían considerar aquella encarcelación como tortura o eso pensaban ambos antes de que el día llegara.

Cuando las puertas se abrieron frente a Kylo, dos hombres lo agarraron en un intento de sacarlo de allí a arrastras. Pero era orgulloso, no dejaría que se lo llevaran de allí tan fácilmente. Golpeó a ambos con fuerza golpeándose contra las paredes. Iba a seguir, después de todo él era más fuerte que aquellos hombres, pero la presencia de un tercero provisto con lo que parecía la pica de fuerza de Uri, lo impidió.

Su rostro más sombrío que el de los otros delataba que no sería un interrogatorio normal y corriente. Haciendo uso de la pica, lo neutralizó. Fueron necesarios dos golpes al nivel intermedio del arma para que cayera al suelo. No dijo palabra alguna, se limitó a dejarlo inconsciente para que los otros ya recuperados pudieran arrastrarlo hacia otra sala.

Cuando Kylo despertó se vio en una sala muy distinta, era de cemento gris, fría y oscura. Por su parte el caballero se encontraba sentado en una silla igual a una que enfrente tenia. No sabía con qué le habían inmovilizado las manos a la espalda, pero el uso de la fuerza no le era suficiente para desatarse. Estaba solo, nadie entró durante un largo rato, hasta que por fin uno de los hombres abrió la puerta. Se colocó ante él mirándolo con los brazos cruzados sobre el pecho, no sabía de quien se trataba, no le sonaba en absoluto, ni como un miembro de la resistencia.

El hombre no dijo palabra, se limitó a golpearlo. Lanzo un primer puñetazo sobre su rostro, partiéndole el labio. Kylo escupió sangre con rabia antes de mirarle con un aire retador. Otra vez el silencio y un nuevo golpe. Así se sucedieron dos, tres, cuatro puñetazos. Kylo gruñía y se quejaba, pero no decía palabra alguna. Hasta que ya por fin el hombre habló.

-¿Sabes quién soy? -Lo miraba desde arriba, mientras se masajeaba los nudillos, le dolían a cauda de los golpes.

-Una persona insignificante, carente de importancia. -Contestó el caballero mientras la sangre escurría de su boca y mejilla.

-¡Tu mataste a mi familia! -Gritó el hombre antes de volver a golpearlo estaba vez haciéndolo caer junto con la silla al suelo.

Kylo notaba el dolor de su rostro y el choque contra el suelo no hizo menguar lo que sentía. Lo miró lleno de rabia -Y acabare contigo en cuanto me sea posible. -Una patada voló al estómago del moreno provocándole un quejido de dolor.

-Llevo mucho tiempo esperando esto. -Se regocijaba el hombre mientras lo veía ahí tirado. Lo golpeo repetidas veces, propinándole varias patadas en el estómago y una en el rostro. Alzó una mano y dos hombres más entraron a la estancia, acompañados por un droide utilizado habitualmente para sofocar incendios. No tardaron en agarrar la manguera y sin miramientos le apuntaron.

El agua helada y a presión impactaba sin vacilar sobre el cuerpo de Kylo, herido y tirado en el suelo. Se deslizó junto a la silla hacia atrás por culpa de la potencia, hasta chocar con la pared. Le era difícil respirar, tragó agua en grandes cantidades y el dolor que sentía parecía estar destrozándole por dentro. Cuando el agua cedió, el primero de los hombres ya lo esperaba enfrente para asestarle otro golpe con la pica. Esta vez solo hizo falta uno para que cediera a la inconsciencia.

[Star Wars KyloOc] No es necesaria tanta oscuridadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora