KIDNAPPING.

❥ the final hijacking

— ¡Vamos apúrense! ¡Ya es tarde!

Michael luchaba con las maletas del rubio. Él claramente le dijo que sólo empacara lo necesario e indispensable, que después podría comprar más cosas a donde iría, pero no que empacara casi toda su casa.

— Luke, creo que había quedado claro que no fueran muchas cosas, sólo lo importante

— Para Luke, todo esto es importante, créeme — Respondió Ashton, quien estaba totalmente tirado en el suelo, se había rendido de seguir llevando las cosas de su rubio amigo

— ¿Qué es lo que traes en ellas? ¿Rocas? — Luke rodó los ojos ante las quejas de Michael

— Son mis libros, mi ropa, mis zapatos, mis peluches, mis cds...

— Tu casa entera — Intervino el rizado

— Muy gracioso, Ashton

— ¡Es la verdad! A este paso necesitaras un avión exclusivo para todas tus cosas.. ¡Auch! — Un golpe era lo que había recibido de parte del oji-azul

— Ashton, deja de decirle sus verdades a Luke

— Que gran novio eres Clifford — Bufó, cruzandose de brazos

— Me encanta como suena eso, novio

— ¿Podrían dejar sus cursilerías para otro día?

— ¡Cállate, Ashton! — Gritaron ambos al molesto rizado que seguía en el suelo, las personas ya comenzaban a verles raro

— Bah, a todo esto, nunca me contaron como es que se convirtieron en pareja, no era algo que viese venir

— ¡Es una gran historia!

Luke había estado planteándoselo, aquello que comenzaba a sentir por Michael era más que simple cariño. Debía admitir que el tiempo que llevaban de conocerse no era demasiado, pero había sido suficiente para aquel sentimiento. El rubio no sabía si era algo bueno o malo, si debía irse sin decírselo o era momento de arriesgarse a ello.

— Hey, rubia, ¿en qué piensas? — La voz de Michael inundó sus oídos, sintiéndose relajado ante ella

— En nada importante

Michael notaba la seriedad de aquella simple oración, por lo general Luke siempre decía algo tonto o con un toque de humor, no algo así de cortante y serio. Era preocupante.

— Puedes contarme lo que sea que te pase — El teñido no estaba muy seguro de si Luke confiaba tanto en él como para contarle sus problemas, pero nada perdía con intentarlo

— He estado pensando en que voy a extrañarte.. — Clifford le miró esperando a que continuara, temía decir algo incorrecto — Y en todas las cosas que hemos pasado juntos, se que no es mucho tiempo, pues no te mantuve tanto secuestrado, pero fue algo.. significativo para mí — Un suspiro salió de sus labios, era ahora o nunca — Al principio debía admitir que me asustabas, ¡Nunca pensé que fueras a actuar de aquella forma! No es lo que una víctima haría, pero supongo que tu forma diferente de ser fue lo que me llamó la atención. Michael Clifford, realmente me gustas, y mucho, y me arrepiento de no haberme querido dar cuenta antes..

Michael se quedó en silencio, Luke cerró sus ojos esperando escuchar las palabras del rechazo, o el como Michael comenzaría a reírse de lo patético que había sido. Pero nada sucedía y el silencio era lo que más le aterraba.

— También me gustas, Luke, más de lo que me gustaría pensar

— Que lindo es este sueño

— ¿De qué hablas?

— ¿Acaso no estoy soñando? — Michael le miraba sin entender — Porque ¿cómo alguien como tú se fijaría en alguien tan tonto y torpe como yo?

— Eres increíble, Luke, nunca pienses lo contrario.. — Tomó sus mejillas entre sus manos — Ahora, tú me gustas, yo te gusto.. ¿Te gustaría ser mi exclusiva rubia pasiva?

— ¿Esa es tu forma de pedirme ser tu novio?

— Al estilo Michael Clifford

— En ese caso, sí, me encantaría

— Joder, que gran historia — Ashton fingió limpiarse una lágrima

— Bien, ahora levántate de ahí que pronto tendremos que irnos

En el alta voz se pudo escuchar el anuncio del vuelo donde Luke y Ashton se irían, este último decidió darle su espacio a la pareja para que pudieran despedirse a gusto

— Ahora que somos algo, lo que menos quiero es separarme de tí — El rubio abrazó fuertemente a su novio

— Yo tampoco, cariño, pero sabes que es lo mejor, al menos por ahora, en lo que se calman las cosas aquí

— ¿Irás a visitarme cada que puedas?

— Sabes que sí

Unieron sus labios por última vez, tratando de que a ninguno se le olvidara el sabor de labios del otro, en la sensación de sus labios en sincronía, debía quedar marcado hasta su reencuentro.

— Es momento de irme, te extrañaré mucho, Mikey

— Te extrañaré más, Lukey

Un último abrazo bastó para que finalmente el rubio se girara en dirección a donde un avión lo esperaba.

Dos corazones estaban siendo separados, pero ni los miles de kilómetros podían hacer que aquello que sentían se esfumara.

Si algo había hecho bien Luke, fue en secuestrar el corazón de Michael, y este definitivamente no lo quería de vuelta, confiaba que con ese rubio torpe estaría seguro, y que sería tratado con amor y delicadeza.

Pronto podrían estar juntos, así comenzando una historia rara de amor.

Donde el secuestrador mediocre logra capturar el amor de su víctima.

Fin.