N/Estela:
Jay se ha ofrecido a traerme a casa luego del club y a venido muy callado desde entonces.
— ¿Que ocurre? — pregunto, y al hacerlo lo saco de su propia burbuja de concentración.
Me mira pero aún no hallo respuesta de mi pregunta.
— ¿Qué qué? — es eso lo que contesta luego de largos segundos de espera.
¡No me estaba prestando atención!— Olvídalo Jay hemos llegado, voy a entrar que pases buenas noches— Hablé decepcionada para después emprender mi viaje hasta mi aburrida puerta.
Sentía mis ojos arder de desesperación, deseando encontrarme dentro de mi guarida y así permitirme echar toda mi frustración fuera,
él me gustaba y pensaba que igual le pasaba lo mismo,
que tonta me siento.De pronto sentí una mano cubrir mi brazo y detenerme el rumbo levemente, era Jay, aliviada no pude avanzar más sin poner una sonrisa en mi rostro siguiéndome Jay al notarla.
— Eres diferente Estela, sé que soy un aguafiestas pero si no te maté de aburrimiento hoy quisiera volver a salir contigo.— Dijo en voz baja, algo cabizbajo, quizás esperando el rechazo pero con esa chispa que siempre traen sus ojitos.
— No hay que esperar a la próxima cita para que esta sea la mejor — Dije esperando que mi acompañante conociera mis intenciones.
Y entonces me acerqué, con esa sonrisa que no puedo hacer desaparecer cuando estoy con él.
Empinándome para dejar un beso en sus labios, el tomo mis manos en ese corto beso que se convirtió en cálido cuando Jay me había correspondido.— Buenas noches — le dije aún a centímetros de sus labios, y estas son las mejores pensé.
— Las mejores — respondió sonriendo mientras reproducía un pensamiento loco de mi cabeza.
Entonces camine esta vez segura hacia mi amada y colorida puerta y le grité — ¡Me gustaba cuando tenias barba! —
Y entonces soñé con Jay, reproduciendo el primero de tantos besos.
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M A Y. "Mujer del mes de mayo"
Short StoryMay era ... U n a M u j e r N a c i d a E n U n M e s C o m o E l D e M a y o