Testamento

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Ante la caída en perdición, he yo de dejar una constancia de aquello que dejo atrás.

A ella, mi musa actual que posiblemente es alguien a quien agradezco de por vida con una deuda enorme, yo quisiera cederle todo aún cuando tienda a reducir las cosas a basura. Mi interés de vida sigue ahogado en la ridícula idea de que no ha llegado final aún a esa historia aunque todos prefieran lo contrario, pues vive encadenado al lamento que tanta culpa acumuló y jamás liberó. Mi corazón, en todo aspecto es suyo, incluso el físico si así es requerido. Todo es suyo en cuanto llegue la muerte, todo aspecto de mi; ycomo aquel momento que ella me dejó el cupcake en mi buzón o yo de forma indirecta le di unos chocolates, podrá tirarlo a la basura si así es lo que siente, no quiero más en este mundo ya, sinceramente, ella fue lo que me dio algo por lo que quería seguir aquí y todo eso aún a mi disgusto llego a su fin.

Diario de un enamorado bajo ceroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora