Desvanecer

I Capítulo: -Esta es mi historia-.

Amaneció, desperté de la manera más drástica, otra vez mis horribles pesadillas, que noche tras noche, día tras día, perseguían mis sueños.

Esta mañana era lo bastante silenciosa, tan sola, pude imaginar que no había más nadie en casa, sólo yo y mi perro. Hoy era uno de esos días en los cuales no quería despertar, las pesadillas de mis sueños son menos horribles que en mi realidad, mi vida no es tan gris , se torna menos dolorosa.

Las ganas de quedarme en cama toda la mañana eran altas, no quería levantarme, traté de retomar mi sueño o debería decir, pesadilla.

Lo conseguí, me había quedado profundamente dormida, horas después mis padres llegaron a la casa, me despertaron con los molestos ruidos que estaban generando en la cocina.

Había decidido levantarme por fin de la cama, caminé directo hacia la cocina para saludarlos. Mi madre sonaba alterada al igual que mi padre, se les podía notar en sus rostros ese grado de estrés y de angustia, algo les preocupaba. No me resistí y les pregunté con una voz muy desesperada: -¿Qué ocurre?-.

Mi madre levantó su rostro y me miró a los ojos, con una mirada profunda, esas miradas que te cuentan todo antes de que la persona lo haga, tragó fuertemente y habló: -"No sé que vamos a hacer"-, se le notaba su angustia hasta en su forma de hablar.

Me desesperé aún más, mis ojos estaban saltones, mi boca totalmente abierta, mientras decía altamente: -¿Qué ocurre?-.

Mi padre dejó de hacer lo que hacía, me tomó de la mano mientras le indicaba a mi madre que viniera, nos llevó a la sala y nos señaló hacía el mueble para que nos sentáramos.

El no decía ninguna palabra y eso generaba una terrible sensación de desesperación y de inseguridad en mí.

Mi padre respiró profundamente mientras con sus manos frotaba su cabeza rústicamente, pensaba mucho, hasta que por fin se decidió y habló: -Emma, hija algo fuerte está ocurriendo-.

Interrumpí con un grito y una expresión de asombro.

Mi padre continuó hablando, pero le costaba, se le podía sentir ese nudo en la garganta que no lo dejaba expresarse con claridad: -La situación del país está cada vez peor, nos queda muy poca comida, no tenemos tanto dinero, no nos alcanza, no conseguimos comida y no sabemos que hacer-.

Esa palabras hicieron que mi mundo se paralizara un momento, que se desplomaba, sentía que estaba en una cuerda floja y que pronto caería.

También sentía un enojo muy grande, pero esa gran molestia no era hacia mis padres, esa furia era hacia los grandes corruptos que componían el gobierno.

La situación de mi país estaba crítica, cada vez peor, no sólo había escases de alimentos, sino también una gran inflación de precios, una gran inseguridad, mi país se estaba desvaneciendo. Ese enojo invadía mi cuerpo, mis pensamientos de molestia y tristeza llenaban toda mi cabeza, sólo pensaba en ¿Cómo un gobierno puede destruir a su mismo pueblo? El que destruye a su propia patria puede destruirse a el mismo.

Ya no soportaba más esta situación; ver esa preocupación en mis padres y de la mayoría de las personas en mi país no me dejaba tranquila.

Yo sabia que apenas tenía 16 años, pero no importaba la edad, uno siempre puede marcar la diferencia.

Soy Emma Jane Parks y esta es mi historia.

...

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Frase: -"Si la vida te hace caer es porque esta probando que tan fuerte eres y cuantas veces te puedes levantar" -JhomarO.

Muchas gracias por leerme.

Los quiero mucho.