Te necesito © [Teen Wolf] [Isaac]

Capítulo 12: El despertar

Beth

Tienes los ojos cerrados pero realmente estas consciente, eso es la peor tortura que se puede tener, y lo sabré yo que casi me matan dándome latigazos.
Había escuchado perfectamente las conversaciones que tuvieron los médicos delante mía con mis padres, y también a la gente que me vino a visitar. Hasta pude notar como Isaac siempre estaba ahí, por alguna razón podía notar la presencia de los demás y saber quien era aun teniendo los ojos cerrados y sin escucharles hablar.

Lo único que podía ver era oscuridad. Una oscuridad que me transmitía un miedo aterrador. Quería abrir los ojos y decirle a todo el mundo que estoy bien pero simplemente no podía, algo no me dejaba reaccionar.
Una descarga eléctrica pasó por mi dedos cuando se fue la luz en todo el hospital, esa pudo ser la única oportunidad que tenía para poder abrir los ojos, pero no lo hice porque note ese olor a sangre. Me da miedo la sangre, me da miedo lo que esta pasando y lo que va a pasar.
Presiento que esta noche va a pasar algo malo.

-Tranquila, esta bien - oí la voz de Isaac - Confía en mi- estaba intentando tranquilizar a Mía- Iré a ver que ha pasado, tu quedate aquí con ella.

Algo en mi cabeza me gritaba que le impidiera que saliera de la habitación. El hospital esta inundado de ese olor a sangre, algo va a hacer daño a Isaac si sale por esa puerta.
Note como el peso de alguien se sentaba en mi cama a mi lado, era Mía. Ella me empezó a acariciar el pelo, sé que ahora mismo esta llorando y que también esta asustada, su corazón esta latiendo muy rápido.

-Te vas a poner bien...tienes que despertar - me empezó a hablar, su voz sonaba apagada. Ahora mismo es cuando mas ganas tengo de despertar y gritarle que estoy bien acompañado de un abrazo.

Los minutos pasaban y mis nervios estaban al máximo ¿Cuándo volverá Isaac?¿Estará bien?¿Por qué no vuelve la luz? ¿Mía podrá seguir aguantando? Sé que ella le tiene micho miedo a la oscuridad y no le debe de ser muy agradable estar aquí a oscuras.

El olor a sangre volvió a inundar mis fosas nasales pero esta vez era mas cercano, la imagen de unas garras llenas se sangre vinieron a mi cabeza. La muerte estaba cerca y yo sólo quería gritar, gritar para avisar de su llegada.

Oí un rugido al otro lado de la puerta, mi amiga me estaba apretando la mano con fuerza, esta asustada.
Unos segundos después y volvió a oírse de nuevo ese rugido.

-¿Qué es...eso? - oí la voz de mi amiga hablar en un susurro, esta claro que lo dijo en voz alta para ella misma.

De repente algo hizo click en mi cabeza, como si acabarán de darle a un interruptor, y abrí los ojos. Miré a mi mejor amiga que se le había escapado una lágrima acompañado de una sonrisa. Ella me dijo algo pero yo la ignoré. Me levante de la cama sin seguir haciendo caso a lo que me decía. Estaba perdiendo el control sobre mi cuerpo, bueno mas bien, ya lo había perdido porque ahora mismo yo no daba las ordenes para moverme. ¿Qué me esta pasando?
Caminé hacia la puerta y puse mi mano sobre el pomo para abrirla. La mano de mi amiga se posó sobre mi hombro, ella me hablaba pero yo no podía escucharla, era como si mis oídos estuvieran cerrados antes cualquier ruido. Hasta que escuche un pitido horrible. Quería llevarme las manos al oído para taparlos y que parase pero al parecer no me respondían.
Abrí la puerta. El olor a sangre llegó de nuevo mas fuerte a mis fosas nasales.

Giré la cabeza hacia mi derecha y vi algo que me dejo sin palabras. Isaac estaba en el suelo sobre un charco de sangre ¿Qué esta pasando?
Oí otro rugido del otro lado. Giré mi cabeza hacia esa dirección y vi un lobo de ojos rojos brillantes.
Un grito se escuchó detrás mía, era Mía. Ella me apartó suavemente de la puerta y se acercó a Isaac.

-¿Qué coño...? - miro en mi dirección y luego volvió a gritar al darse cuenta de que había un lobo.

Una sonrisa se escapó de mis labios, ya no me sentía yo misma.