-Fue mi ex novia, Danielle. La amaba más que a nada en este mundo. Siempre he sido una persona solitaria, y ella llego a sanarme en todo sentido, nunca había sido tan feliz como lo fui con ella. Siempre trate de ser lo mejor para Danielle pero ella no se esforzaba ni lo más mínimo en ser mejor para mí. Ella consumía drogas, nunca supe que droga era y tampoco quiero saberlo. Perdía el control de ella misma cuando estaba en ese estado. Un día, hace dos años aproximadamente, estaba con mi hermana mayor, no nos veíamos hace años, la abracé como nunca había abrazado a nadie porque era la única persona de mi familia que me quedaba. En eso entra Danielle a la habitación, estaba más que drogada y creyó que le había sido infiel. Por un malentendido estoy aquí, y eso me da tanta impotencia. Lo único que agradezco es que me haya matado a mí y no a mi hermana, no me lo habría personado jamás. Danielle, me apuñaló dos veces, justo en el corazón, una por cada año que estuvimos juntos. Morí al instante y a ella no le importó. Pero bueno –dijo con una sonrisa de lado- Ahora estoy aquí, en un mejor lugar, dónde no tengo que preocuparme por nada y estoy bien ahora, sin ella.
Su historia me descoloco por completo, no lo podía creer. Cómo alguien no daría el mundo por este chico. No sabía que decirle, así que solo repetí lo que me había dicho él.
-Lo lamento por ella, se perdió a un gran chico –Dejo escapar una carcajada.
-Eres una copiona –sonreímos. – Me gusta estar contigo –confesó.
-A mí también. –sonreí y él sonrió como nunca, se veía tan perfecto sonriendo.
Seguimos caminando hasta que dijo:
-Sky, ven aquí te quiero presentar a alguien. - me llevo hasta un lugar en donde no habían lapidas, era precioso, lleno de pasto y bellas estatuas. – Hugo –lo sentí gritar con fuerza- déjate ver, ya sabe.
En ese momento apareció un chico, un poco más alto que Felipe, y con unos kilos de más, tenía los ojos color esmeralda. Sentí su cercanía de inmediato, ya que se acercó con rapidez a mí.
-Hola preciosa –dijo el tal Hugo- No sabía que venían chicas tan bonitas por estos lados –dijo mostrando sus perfectos dientes.
-Hugo –habló Felipe- bueno... Sky él es mi mejor amigo, Hugo. Hugo ella es mi novia, Sky.
¿Qué? Mi corazón se detuvo por completo, suena tan linda esa palabra de sus labios.
-Autch –espetó Hugo- Bueno linda, un gusto conocerte y no le rompas el corazón a mi amigo, de nuevo. –y rió a carcajadas mientras se iba, me costó entender pero entendí.
-Así qué... ¿Soy tu novia? –dije mirándolo con cara de "¿qué me perdí?"
-No tengo tanta suerte –sonrió con esa sonrisa tan segura que tiene y yo me sonroje como nunca. – trataba de sacarte a ese cretino de encima, es un mujeriego, y aparte no me gusta compartir. –volvió el color rojo a mis mejillas.
Respira, respira... Intentaré cambiar de tema.
-¿Cuándo nos volveremos a ver? –pregunté, he querido hacerle esa pregunta desde que lo conocí.
-Siempre estoy aquí, ven cuando quieras, estoy atrapado en estas paredes.
-¿Atrapado? – nadie lo ve, ¿podría ir a robar comida a los centros comerciales o a bajarle los pantalones a el maestro más odiado sin problema y está atrapado?
-No puedo salir de este cementerio, a menos de que tenga un alma, pero te recuerdo que estoy muerto –rió- solo puedo estar acá y es bastante aburrido a veces.
-Tenemos que solucionar eso, te vendré a ver lo más seguido que pueda. –me miró con un rostro inundado de felicidad. Quiero hacerlo feliz, sé lo que es sentirse sola y no quiero que nadie más lo sienta, menos una persona tan maravillosa como él.
Nos divertimos mucho el resto del día. Pero me tuve que ir nuevamente a casa, mañana era lunes y tenía clases que cumplir.
Felipe en multimedia.

ESTÁS LEYENDO
¿Imposible?
Romance-Soy una persona sin alma, ¿puedes amarme así? Porque te amo. -Dijo con lágrimas en sus ojos.