-Sip, era yo- Dije avergonzada.
Sonrió nuevamente.
-Bueno, tengo que volver a trabajar-
-Ok, nos vemos-
-Chau-
Cuando se fue me sentí genial. Alfin conocí al panda. Mi madre tenía razón: cuando menos me lo espere lo conocería.
Esa tarde fui a la casa de Stacy. Toqué la puerta y me abrió Shami, la hermana menor de Stacy.
-Holiwi, eres tu la loca del panda- Dijo la chica.
Esa Stacy no cierra su boca.
Cuando entré estaba Stacy viendo televisión.
-¡¡STACYYYYYYYYYYYYYYYYYYYY!!- Grité.
-Que te paso ahora, ¿te chocaste con el panda o algo?-
-Si-
-¡¡¿QUEE?!!... ¿Lo conociste?-
-Siii... hablamos 52 segundos-
-Entonces, ya no seguirá siendo "tu panda"-
-No creo, ahora es Alexander-
-Que nombre horrible, para mí seguirá siendo tu panda-
En los minutos siguientes le expliqué a Stacy detalladamente los 52 segundos de conversación que tuve con el panda.
Stacy me quedó mirando
-Y... ¿Ahora qué?- Me dijo.-Hay que dar el siguiente paso-
-Chan chan chaaaaaaaan-
Me quedé en casa de Stacy hasta tarde. Cuando regresé a mi casa mi madre ya estaba durmiendo. Estaba a punto de acostarme cuando recuerdo los deberes. Pensé... Estaba cansada y tenia sueño pero tenía que subir la nota de literatura... qué difícil decisión. Una de las desiciones mas dificiles de la vida es hacer o no la tarea. Me quedé meditando en eso y se me ocurrió una idea. William siempre me quiere ayudar pero me cohíbe mucho... asi que pensé que no sería mala idea pedirle la tarea...
*Llamando a William...*