Entre Dos Chicos

Auch

Ya llevo casi 10 minutos en la puerta de mi casa tratando de decidir como actuar con esa mujer que quiero y que me  está haciendo sufrir, mi madre.

No quiero sonar a una niña berrinche, además tampoco he escuchado sus razones así que me decido por no gritar, mantener la calma y en lo posible no llorar delante de ella.

Muerdo mi labio inferior y toco la puerta.
Escucho que grita «¡Voy!»  y trato de respirar y exalar, respirar  y exalar Kat. Es fácil.
Sólo respirar y e..

La puerta se abre.
-Hola hija, te estaba esperando.-Dice mi madre con una sonrisa demasiado grande en su rostro.

-Claro.- Murmuro.

Llegamos a la cocina y me dirijo a la nevera para tomar agua y así tener algo en lo que distraerme.

Mamá se sienta en una de las sillas del comedor de la cocina y fija su mirada en mi.
Lo sé, porque la siento.
-¿Y bien?-pregunta.
Doy la vuelta con el vaso en mi boca y alzo la ceja en señal de que se explique.

Ella rueda los ojos, sí, mi mamá también rueda mucho los ojos.

-¿Y bien?-repite.-¿No me vas a felicitar?

Me atraganto con el agua y la escupo.
¿A dicho felicitar? Díganme que he escuchado mal, por favor.

-¿Felicitar?-pregunto incrédula.
Ella me mira confundida.
-Pues sí, hija.. creí que Pame te había contado lo del casamiento.

¿Pame? Kat.. respira y exala recuerda, respirar y exalar, no vayas a..

-Ah, sí.. Esa perra de Pame.-digo su nombre en burla.-¿De verdad me estás pidiendo que te felicite, mamá?-pregunto con un tono de sarcasmo.

Ella agranda los ojos y se dirige a mi furiosa. -Katherine, ¿Qué es lo que te está pasando? Respeta, no me hables asi y respeta a tu hermana señorita.

-¿Mi hermana?- Río sin poner evitarlo.
-No te entiendo hija.-Dice mi madre triste.
-Ah, no. No uses ese tono triste conmigo mamá,¿ Qué es lo que te han hecho?
-¿ De que hablas Katherine?-Espeta.

Suspiro y me termino el vaso de agua.
-Mamá, ¿no te das cuenta de lo que me haces? No me habías dicho nada, nada en absoluto.. y de pronto llega una chica de catálogo, toda vestida de rosa y sonriendo demasiado..  y me dice que es mi HERMANA, y que tú te casarás con su padre.

«Que por cierto mamá, es un mafioso, que mal gusto que tienes»
Claro no digo eso, porque me parte la boca.
-Aun no te entiendo, eso es algo bueno.- Dice ella.- quería que fuera una sorpresa.

-¿Una sorpresa mamá? Pues deberías pensarte mejor la clase sorpresas que haces, han salido por 2 meses! ¡Dos jodidos meses!-sí, ya perdí los estribos.- y no me diste la oportunidad de conocerlo.. de conocer al hombre que piensas convertir en mi padrastro!

-Katherine no me grites.

¿Acaso no me escucha?

Suspiro y trato de contener las lágrimas mordiendome el labio pero es imposible.
-Mamá..¿ Sabes como me siento? traicionada, mi propia madre me ha traicionado.

-Pero.. hija.-Dice ella tratando de acercarse.
-No mamá, nisiquiera te das cuenta de lo que me haces.

Me aparto de ella, agarro mi mochila y salgo de la casa sin decir nada.
Es la primera vez que discuto con mi mamá, siempre hemos sido tan unidad.
No entiendo que le pasa.

Voy caminando tan distraída que no me doy cuenta de quien tengo enfrente hasta que tropiezo con él y su bicicleta.

-Ah, Joder! ¡mira por donde vas!.- grito más fuerte de lo planeado sin mirar aún quién es, me he dado un golpe tremendo con la llanta de la bici, perdí el equilibrio y  caí en el suelo.