Subimos a la habitación, y nos comimos a besos recostados en la cama. En aquella habitación fluía pura magia, complicidad y un sentimiento que empezaba a dejarse poco a poco a medida que pasaba el tiempo.
Posó su mano en mi vientre y mientras lo acariciaba por encima de mi camiseta, poco a poco lo fue levantando para poder tocarme la piel directamente. Noté una de las veces que se acercó más a mi para besarme más profundamente, un bulto a la altura de su entrepierna que me resultaba algo cada vez más familiar.
Entonces delizó su mano hacia el botón de mi pantalón y lo desabrochó. Me pusé en tensión y el en el mismo momento lo notó y dejó de besarme.
-¿Estas bien?
-No lo sé.
-¿Te he echo sentir incomoda?
-No lo sé.
-(_), ¿Te ha molestado que bajara la mano?
-No lo se, es solo que estoy muy nerviosa. Y no puedo parar de pensar.
-¿Y en que piensas? -Preguntó.
-En que no se si te va a gustar, ni si yo voy a servir para esto.
-Cielo, estoy seguro de que me va a gustar porque tu me gustas y todo lo que sea tuyo también. Pero no te voy a forzar a nada, no quiero que pienses que quiero que hagamos ya el amor, simplemente quiero conocerte más, quiero poderte dar placer y probar todas esas cosas que no hemos probado nunca. ¿Tu quieres que siga?
-No lo sé.
Rió. Y entonces me cogió la cara con las manos y me besó. Y solo se separó para pronunciar algo.
-Te quiero. Vayamos a ver la televisión un rato.
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-¿Quieres que siga?
Entonces no contesté, le besé los labios como aprobación y el me entendió. Bajo mis pantalones hasta dejarlos caidos en el suelo. Subió su mano por uno de mis muslos y me acarició el ombligo. Sin dejar de besarme ni un solo segundo, fue metiendo su mano por debajo de mi ropa interior inferior y el simple calor de sus dedos ya provocó cosquillas en mi estomago que se potenciarion cuando introdujo en mi cuerpo uno de sus dedos. Dejé salir aire de mi boca y el me miró con atención a los ojos.
-¿Bien?
Yo asentí con la cabeza sin soltar palabra. El
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RollerCoaster (Español)
FanfictionA veces la vida puede cambiarte en cuestión de meses, semanas o días. A veces la vida podría considerarse una montaña rusa, que te hace estar a veces en lo más alto de ella haciéndote sentir repleto de felicidad y otras veces se queda estancada en l...
