La criatura

22 5 0
                                    

Puede notar un aliento cálido en la nuca, y al girarme me di cuenta de que no era una persona lo que nos observaba. Era un ser increíblemente peludo, de ojos rojos y tenía un tamaño descomunal.
Teniendo a dicha criatura bloqueando la única salida que quedaba era muy difícil escapar. Y justo cuando yo ya daba todo por perdido Momo saco del cinturón una navaja y se la clavó en el pecho. El monstruo calló al suelo retorciendose de dolor y nosotras aprovechamos para saltarlo y buscar la salida.
Solo había un problema; no sabíamos para que lado debíamos ir. Si elegiamos el lado equivocado seguramente eso nos haría adentrarnos más en la cueva con la posibilidad de encontrarnos con otros monstruos.
Yo seguía a Mer hasta que finalmente llegamos al borde de lo que parecía ser un precipicio. No se veía absolutamente nada pero parecía como si fuese muy muy hondo, ya dábamos por echo que nis habíamos equivocado de camino y nos estábamos adentrando en la cueva. Pero derrepente desde el otro lado de el precipicio escuchamos nuestros nombres, no se podía distinguir ninguna cara, solamente dos siluetas que nos llamaban, intentamos averiguar quienes eran por la voz pero el precipicio hacia eco y las distorsionaba.

Run or die.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora