Breathe me

Capítulo 4 "Miedo"

Abrió los ojos y se quejó, la cabeza le dolía aunque era soportable. Lanzó un bostezo y se removió en la cama buscando calor bajo las cobijas, dio media vuelta y se encontró con un bulto tibio a su lado, se enderezó y enfocó la vista para saber qué era eso. Eren dormía bocabajo abrazado a una almohada, respirando tranquilo y con la expresión relajada. De inmediato recordó y suspiró.

Sonrió y besó su mejilla, no se arrepentía de lo que habían hecho pues el castaño había tenido razón, no era tan malo si la otra persona sabía o tenía el más mínimo interés. Al ser día de descanso para los dos no tuvo prisa al levantarse y podía buscar las aspirinas en su maleta para poder quitarse el dolor, después lo recordó, no llevaba más que lo que tenía puesto –claro, no en ese momento-.

Bostezó y removió a Eren, no le gustaba esculcar en las cosas de los demás así que le pediría a él la aspirina. El castaño se quejó y pasó un brazo por su cintura para atraerlo aprisionándolo contra su cuerpo, Levi hizo una mueca y alzó la vista para pellizcar su mejilla.

—Quiero dormir...—dijo con voz ronca escondiendo el rostro en su cuello. —Duerme igual.

—Eren, no podré dormir con el dolor de cabeza.

—Duerme más y se te quitará.

—Eren por favor, solo quiero una aspirina.

No recibió respuesta, parecía que Jaeger había caído de nuevo en el sueño, bufó y se removió entre sus brazos para despertarle.

—Eren.

—Me encanta mi nombre, Levi, pero ahora solo quiero dormir.

—Dime donde están las aspirinas y te dejo en paz.

—En el baño...en el anaquel del espejo—murmuró a duras penas cayendo dormido de nuevo.

El azabache rodó los ojos, besó su mejilla de nuevo y se escabullo para ir al baño.

—Vuelve...cuando termines...—balbuceó sin levantar el rostro de la cama, provocando una sonrisa en el menor, era gracioso.

Se puso la bata del castaño que estaba en una silla y caminó al baño descalzo, estaba de tan buen humor que incluso creyó que las palabras de Eren eran ciertas, era un amargado por no tener sexo. Contuvo una risita de su propio pensamiento y se alentó, si así iba a despertar cada que tuviera sexo entonces podría ceder un par de veces con el castaño...el único problema que veía ahora es que su amistad iba a cambiar drásticamente...aunque tampoco le molestaba.

Se lavó la cara y se observó al espejo, su rostro lucía descansado... ¿qué hora sería? ¿Cuánto había dormido? No lo sabía pero estaba seguro que nada iba a arruinar su buen humor.

Abrió el anaquel y se puso en puntas para revisar el estante de hasta arriba donde no alcanzaba a ver, tanteo despacio en busca de una caja o frasco que contuviera las pastillas que tanto anhelaba en ese momento. Sonrió cuando encontró lo que buscaba y lo jaló para poder bajarlo. Junto con el medicamento cayeron otras cosas que rebotaron en su cabeza y terminaron en el lavabo, se sobo el golpe y cerró los ojos, eso no le ayudaba nada a su dolor de cabeza.

Abrió los ojos y vio lo que había tirado para poder devolverlo sin embargo sus manos temblaron, dejó el frasco de aspirinas de lado y tomó el pequeño frasco de vidrio para revisar la etiqueta.

"Dilaudid-HP
250mg"

Tragó saliva y sus labios se volvieron una línea. No, no podía ser lo que estaba pensando porque era sencillamente absurdo, no iba con Eren...tal vez solo...era por tratamiento...

Sí, tratamiento.

Tensó la mandíbula y tomo la jeringa junto con el medicamento para ponerlo donde estaba, iba a pensar positivo y no iba a sacar conclusiones apresuradas, iba a confiar en Eren y su resistencia...pero de alguna manera lo estaría observando, no iba a pasar por eso de nuevo.