Desperté, abrí los ojos lentamente para poder hacerme a la luz de la habitación. Cuando los abrí del todo me di cuenta que no era mi cuarto, mire mi cuerpo, estaba rodeado por unos brazos que no eran los de Bradley. Seguí mi mirada hacia arriba y vi a Tyler, dormido, su pelo rubio revuelto y la boca entre abierta. Al contrario que Brad, su cuerpo desprendía calor, un calor bastante agradable, no quería moverme, estaba muy cómoda. Aún así zarandeé a Tyler.
- Ty - Dije dándole leves golpes en la cara - Oye, Tyler.
- Hum - Dijo desperezándose.
- Despierta "Princeso" se nos va a hacer tarde para el desayuno.
- Los "Princesos" necesitamos dormir mucho para estar guapos.
- Pues duerme mucho entonces - dije y empecé a reírme.
- Perdona, pero yo soy belleza pura - dijo.
- ¿Tú? - empecé a reír - Tu eres feo - le saqué la lengua.
- Vamos admítelo - dijo agarrándome la cara con las manos, se acercó a mí y dejo su cara a pocos centímetros de la mía - sé que te encanto - se acercó muy lentamente y justo cuando iba a besarme se paró - Y ahora por llamarme feo, te dejo con las ganas.
Se levantó de la cama, se estiró, me enseñó la lengua y se marchó al baño. Sinceramente no me habría importado que me besara, besa bien.
Me levanté de la cama, mientras bostezaba. Caminé con mala gana hasta la puerta del baño y toqué dos veces.
- Ty ¿Que te traigo para el desayuno?
- Solo una manzana, linda.
- Vale, oye, ¿te importa que te coja una camiseta? Es que no quiero llevar esta otra vez y no me apetece ir hasta mi cuarto.
- Como tu quieras - escuché el grifo abrirse.
Fui a su ropero y todo estaba perfectamente ordenado, incluso más que el mio. Me fijé que en la balda de arriba, tenía muchísimos libros, y ahora que lo pienso, hace tiempo que no leemos y comentamos un libro juntos. Me puse la primera camiseta que encontré y bajé a la cafetería. Cogí una manzana para Tyler y un donut para mí, los pagué y subí.
Entré al cuarto y Tyler estaba sentado en la cama, con una toalla amarrada a la cintura y con otra secándose el pelo.
- ¿Son cosas mías o tu siempre andas medio desnudo? - dije yo dándole una mordida a mi donut y entregándole su manzana.
- No es que siempre ande desnudo, es que tu siempre entras cuando me estoy cambiando.
- Pues perdón entonces, no es mi intención - dije sentándome en la cama de Tony.
- Por cierto, esa es una de mis camisetas favoritas, te queda muy bien.
- Gracias, lo sé, todo me sienta genial - dije con ironía y riéndome.
- Oye, debemos hablar - dijo Tyler cambiando su expresión alegre por una realmente seria - Es por lo de ayer.
- ¿Por lo de ayer? - dije pensando - Oh...el beso.
- Si, respecto a eso, yo... - dijo.
- No hace falta que lo expliques, era un momento de desesperación, ya que a lo mejor podías morir - le dije yo sonriendo.
- La verdad es que lo habría hecho antes, pero no me atrevía... - Yo no sabía que decir, me quedé sin palabras - Es que claro, yo en mis libros siempre veo la historia de dos grandes amigos, uno se enamora y la amistad se pierde... Yo no quería que pasara eso.
- Tyler...yo... - dije
-No hace falta que digas nada, solo con que lo sepas me basta - dijo sentándose a mi lado - Seas mi novia o no, siempre serás mi pequeña.
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¿Mi guardián?® 2Temporada
Fantasy.Segunda temporada. Primer libro "El nuevo" Los ángeles lo llaman placer divino; los demonios sufrimiento infernal; pero todos acabamos cayendo en el, seamos como seamos, ángeles o demonios, todos acabamos amando a alguien por muy diferente que sea...