¿Mi guardián?® 2Temporada

capitulo 10

- ¡Hey! ¡Dominic, Hey! - escuchaba la voz de John por algún lugar de la sala, pero no lo veía.

Se me había hecho tarde para llegar al discurso, así que tenía que jugarme la vida para intentar pasar entre gente gigante ¿Qué narices le daban de comer a estos chicos cuando eran niños? Soy un pitufo al lado de ellos. Entre codazos y empujones logré llegar hasta mis chicos.

- Chicos...- dije cansada - al fin, ¡casi muero entre tanta gente!

- exagerada - me dijo luka

- Ves, por eso te digo que siempre hay que salir unos minutos antes - me regaño tony.

- No es momento para tus cosas de "Ves, te lo dije" "Siempre tengo razón" Bla, Bla, Bla - dijo haciendo una mala imitación de su voz.

- Nunca cambiarás he domi.

- Nunca - le dije yo

- Sh sh, chicos, que ya empieza - dijo Tyler.

Como era de esperar, era el típico discurso de todo director, osea, aburridísimo. Contó que los fines de semanas se podían pasar en el campus que está en la parte de atrás de la universidad, justo al lado de la cancha de fútbol.

Para no aburriros, duró como una hora y media el dichoso discurso. Lo bueno era que empezaríamos mañana y no hoy, aunque tengo que ir a buscar mis horarios al aula de bellas artes ya que aún no los tengo.

Al salir de aquella sala, me dispuse a buscar mi aula. Camine por aquellos pasillos largos y anchos, adornados con unas taquillas de color azul, algunas más nuevas que otras, una de ellas me corresponde, pero aún no se cual. Las paredes eran de un color amarillo muy feo y el suelo blanco con manchas negras. Las ventanas que iluminaban el lugar eran grandes y con un diseño rural. Subí las escaleras hasta el segundo piso donde se encuentras las aulas de bellas artes, arquitectura, ilustración, etc. En las paredes de las escaleras había varios carteles de clubes; "¡Únete a las animadoras y baila para nuestro equipo!" "Únete al equipo de fútbol y serás un ganador" "Club de ciencia, para esto debes tener inteligencia" ... y cosas por el estilo. Llegué al segundo piso y miré un mapa que había pegado en un panel.

- Primero a la izquierda... sigo recto... y para la derecha - decía mientras seguía mi ruta con el dedo - Okay, vamos.

Seguí mis propias indicaciones hasta llegar al aula D227, genial esta es mi aula. Entré hecha un manojo de nervios y vi allí al resto de mis compañeros, al fondo estaba tony, mi salvación. Caminé hacia él y le toqué el hombro.

- Tony, menos mal - dije nerviosa - ¿Qué hacen todos aquí? ¿Las clases no son mañana?

- Si peque, pero hoy es la presentación de nuestro tutor.

- Ohh, vale. ¿Darán los horarios no?

- Supongo.

Una chica joven, de unos 30 y pocos años entró, vestida muy elegantemente, una falda de tubo negro, un bléiser negro combinado con una camisa magenta y unos tacones negros. Su cara era de tez blanca y piel fina, unas gafas pequeñas estaban situadas encima de su cabeza sujetando el pelo por detrás de sus orejas. Caminó lentamente hacia la mesa del profesor, se sentó cruzando una de sus piernas y esperó a que todos estuviésemos sentados.

- Buenos días chicos - dijo levantándose y caminando con las manos en la espalda hasta la parte de delante de la mesa - yo soy la señorita Williams, Brooks Williams, pero prefiero que me llamen Brooks, para que no suene tan a "señora mayor" - reímos un poco ante su gesto de desaprobación al decir "mayor"- Como supongo que sabréis esta es el aula de Bellas artes, aquí estudiaremos lo que es necesario para ya luego ustedes decidan qué camino tomar ya que hay varias opciones- caminaba de un lado a otro, lentamente, marcando cada paso, primero derecha, luego izquierda. Siempre correctamente.

Nos explicó lo necesario para su clase, cuando estaba en medio de una frase, tocaron tres veces en la puerta.

- Adelante - dijo ella

Unas converse negras las cuales ya había visto y un pelo dorado alborotado entraron en la clase.

- Lo siento señorita

- Brooks por favor - le corrigió ella.

- Eh... Brooks, perdón por llegar tarde, pero me perdí y estuve dando vueltas por el mismo lugar un rato, hasta que al fin di con esta aula.

- No se preocupe señor...

- Patson, Bradley Patson - Oh dios ¿Enserio? Esto lo están haciendo aposta ¿verdad?

- Bien Patson, siéntese en donde quede un hueco libre.

Miré a mi derecha y... mierda, está libre, pero hay dos sitios libres delante también, por favor que no venga, por favor que no venga, por favor que no veng...

- Hey rudita - dijo sentándose - así que bellas artes eh, buena elección - solo le miré y sonreí.

Pasaron como unos 20 minutos hasta que nos dio los horarios y pudimos marcharnos, me pasé rápido por el aula de alemán, ya que también voy a estudiar afondo ese idioma, cualquiera sabe, puede que algún día nos conquisten los alemanes. Cogí mis horarios y me dirigí a mi habitación, dejé las cosas y me fui a la habitación de John.

- John - dije tocando la puerta - Jooohn - nadie contestaba - John soy yo abre - vamos, que no abría.

Giré el pomo y estaba abierto, por lo que vi John sigue solo en esta habitación, aunque sus cosas están esparcidas por el suelo, un líquido extraño conducía hasta el baño, los seguí y...

- ¡Oh dios, John!

***

Lo siento ciber lectores, no es muy largo, pero es que son las 2:45 e la mañana y no doy para más.

Foto de Bradley en multimedia.