DILF ~ FanFic Tom Hiddleston

Capítulo 5: ¡La boda!

─ "... Tenemos el placer de invitar a su apreciable familia a nuestra unión matrimonial el próximo 10 de septiembre del presente año..." En la calle dah, dah, dah, no sé qué número y no me importa la colonia. ¿Te das cuenta? ¡Una boda! ¡Y yo soltera!─ Mariana puso los ojos en blanco y tiró la tarjeta color palo de rosa lejos. Yo suspiré y me levanté para leer la invitación una vez más.

En efecto, habían invitado a los Thompson a una boda, al parecer de un amigo del trabajo de Andrew. Y Mariana no paraba de decir que estaría aburrida, puesto que el señor en cuestión tenía 50 años. Según ella, los jóvenes iban a escasear en el evento.

─Ve el lado bueno, habrá música y comida... ¡Gratis!

─Sí, habrá música, si tengo suerte van a poner a las Space Girls o algo más viejo. Y de comida... Dios, ve tú a saber qué porquería van a servir. No quiero ir.

─ ¿Y qué dice tu papá? ¿Quiere ir?

─Se siente con la obligación, es como si tú me invitaras a tu boda y yo no fuera. ¿La captas?

─Ya veo... Pues creo que tú tienes que acompañar a tu papá... No vas a dejarlo solo y su alma...

─Obvio no, pero es tan tedioso. Ese día planeaba ir al cine con Tony... Y ahora tengo que ir a esa fiesta...

─ ¿Por qué no invitas a Tony a la boda? Podrías, ya sabes, bailar con él y quizá, si tu papá está distraído, escaparte con él por ahí...

─ ¿Quién lo diría? Con esa carita de inocente que tienes y los consejos que das...

─Oh, todo quieres. Una fiesta divertida y consejos puritanos.

─ ¡Ya sé! Tú vendrás conmigo a la fiesta... Oh sí, oh sí.

─ ¿Qué? Eso sí que no. Yo no soy Thompson... Y en la invitación dice claramente FA-MI-LIA Thompson.

─No te hagas la lista, que para pijamadas y viajes de vacaciones bien que te apuntas, pues vienes conmigo a la maldita boda ésa. O te dejo de hablar...

─ ¿Enserio?

─No... Pero no seas perra y ven conmigo.

─ ¿Por qué no llevas a Tony?

─Porque es un idiota, y porque no quiero que mi papá me arme un escándalo si le digo que invitaré a un chico conmigo. Es bien celoso...─ me mordí el labio. Celoso, cuánto me gustaría que me celara a mí. ─Además tú le caes bastante bien, nunca me pone peros para que tú nos acompañes, dudo que lo ponga esta vez.

Giré la cabeza como el exorcista y le miré con los ojos abiertos. Esa nueva información no me la esperaba.

─ ¿De verdad?

─Sí, hasta se pone feliz. Creo que es porque eres dizque educada y tal. Si fueras un desmadre ya veríamos si se ponía igual de feliz.─ se ponía feliz de que yo fuera a su casa... Creo que me iba a desmayar. ─Le diré que irás con nosotros. Quizá te hago pasar como mi prima lejana, o mi hermana adoptada.

─Vaya, qué tacto el tuyo...

─Bueno, ya me tengo que ir. Llevo media hora de retardo y no quiero que mi papi se ponga loco.─ Mariana recogió la invitación y la metió en su bolso. Se levantó del piso y se empezó a arreglar la ropa frente a mi espejo de cuerpo completo. Esa era la primera vez que Mariana visitaba mi casa, sólo habían sido unas horas pero nos la habíamos pasado bien. Y ahora quería que fuera a una boda con ella y su papá... ¡Con su papá! ─Te escribo al rato para confirmarte si vas o no. Eso sí, tienes que vestirte bien... No es que crea que te vistes como la señora loca que recoge latas en la calle con un carrito de súper, pero... Esta vez échale ganas.