Baby.

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Los llantos de la pequeña Lizzy hicieron que Bucky despertara a ver qué provocaba que su pequeña hija llorara a esa hora de la madrugada. Dio un vistazo a su esposo Steve el cuál dormía profundamente al haber acabado muy cansado luego de su rutina diaria.
Lizzy seguía llorando por lo que Bucky se apresuró a caminar a su habitación.

-Pequeña ya estoy aquí -susurra mientras se acerca a tomarla en sus brazos-. ¿Porqué lloras amor?
-Miedo.. tengo miedo papá -la hermosa niña rubia de ojos azules lo abrazó muy fuerte-.
-Pero no hay nada que temer, tranquila princesa. ¿Quieres dormir con tu papi y conmigo?

La niña asiente con una sonrisa.

-Lo supuse -Bucky sonríe y besa su frente- trae a tu osito y vamos a dormir.

Bucky tomó en sus brazos a la pequeña que llevaba muy alegremente su oso de peluche y la llevó a la cama que compartía con su esposo.

-Papi, papi, ya vine -Steve abrió los ojos y sonrió al ver a su hija-.
-Hola hermosa, ¿vas a dormir con nosotros?
-Shi -Lizzy sonríe y se acomoda entre los brazos de Steve-. Papi... papá quiero un hermanito.
-Pero tienes que esperar princesa, hablaré con papi a ver que opina -Bucky mira a Steve y sonríe-.
-Oh princesa... tendrás que esperar un poco -Steve suspira un poco dudoso- ¿segura que quieres un hermanito? -el rubio envuelve a su pequeña con la sábana y besa su frente-.
-Sí quiero papi -Lizzy hace un pequeño puchero por la actitud de su padre-.
-Ya es hora de dormir pequeña -la voz de Bucky sonaba cansada a tal punto en el que suelta un bostezo-.

Lizzy se acomoda en medio de sus padres y abraza su peluche mientras sonríe olvidando la pesadilla que tuvo hace unos momentos.

                                *** 

Pasaron tres meses desde que Lizzy había pedido a sus padres un hermanito. Hubieron muchas discusiones entre Steve y Bucky respecto a tener otro hijo. Steve aseguraba que tenían que esperar un poco más para que sus ingresos económicos sean mucho más estables y así poder mantener al nuevo integrante de la famialia, pero Bucky le contradecía diciendo que con lo que tenían era suficiente para darle lo necesario al bebé. Algunas discusiones los hacían enojarse por unas horas debido a que nunca coincidían aunque al final Steve decidió intentarlo. Luego de hacer el amor con su esposo incontables veces se cumplió el deseo de su pequeña hija.

Lizzy veía a su papá Bucky muy preocupado por la salud de su papi Steve. Ella pensaba que algo muy malo le sucedía ya que no dejaba de vomitar en el baño. Su inocencia le hizo llorar por su papi y esperaba a que dejara de vomitar.
Bucky observó a su pequeña llorar y en cuestión de segundos se encontraba abrazándola.

-No te preocupes amor, papi está bien ¿confías en mí? -Bucky acarició su cabello con mucha delicadeza-.

Lizzy solo se limitó a mover la cabeza de arriba hacia abajo dándole entender a su papá que sí confiaba en él.

Steve salió del baño con una sonrisa que se desvaneció al ver a su hija con los ojos rojos abrazando a su esposo.

-¿Ocurrió algo malo? ¿Qué pasa princesa? -Steve se acerca a ellos y los abraza-.
-Es que estás enfermo papi, no me gusta verte así -Lizzy deja escapar unas lágrimas las cuales Steve limpia enseguida-.
-No es lo que piensas amor... creo que es momento de darte una sorpresa -dice Steve sonriendo para animar a su hija-. ¿Lista mi niña?
-Shi -Lizzy deja de llorar y se sienta en las piernas de su papá Bucky-.
-Bueno hermosa hemos decidido conceder tu deseo y ¡Adivina qué! -el tono de Bucky era muy alegre- ¡Tendrás un hermanito!


Stucky AU'sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora