Capítulo 2.

1.1K 26 1
                                    

-Hola, Harry- digo cordialmente mientras me doy media vuelta para encararlo.

-Hola, ¿Cómo… ¿Cómo estás?- pregunta, siento su nerviosismo y le regalo una suave sonrisa para reconfortarlo.

-Estoy bien.

-¿Qué haces aquí? ¿Has venido con tus amigos?

-No, yo solo…- miro a Niall quien está sentado con una cerveza en la mano escuchando con atención el penoso encuentro.- Yo solo pasaba por aquí.

El silencio incomodo se hace presente tan rápido que siento que me ha golpeado justo en la cara. Harry se pone sobre las puntas de los pies y regresa a su posición inicial, luego se inclina sobre sus talones y regresa a su posición inicial en un intento por no solo quedarse ahí parado, mirándome.

-Bien… debería irme…- digo dando un paso hacia atrás.

-Si…si…yo…- pasa su mano por el cuello con incomodidad.- Cuídate.

-Adiós, Harry… - volteo a mi derecha y miro a Niall, él me sonríe con complicidad y yo muerdo mi labio inferior para no reventar en carcajadas.- Adiós, Niall… nos veremos luego.

-Nos vemos luego ________- el me guiña un ojo y yo doy media vuelta continuando con mi caminata nocturna.

Nada va bien, creí poder librarme del recuerdo de Harry, pero está en todas partes, literalmente, y estar en Londres no ayuda en nada, el lugar de mis sueños se convirtió en algo completamente triste y lamentable, pero no dejaré que eso me haga caer, estoy en el lugar en el que siempre quise estar, eso es completamente reconfortante para mi.

Al llegar a casa, la familia Williams me recibió con cariño y afecto, nos sentamos a cenar y después cada quien regresó a su habitación, tomé una ducha reconfortante y luego comencé la planeación de mis horarios de clases, los cuales comenzarían en dos días.

En el momento en que mi cabeza toca la almohada –justo después de acomodar las hojas en el cajón del escritorio y ponerme mi pijama- caigo en un profundo sueño. En algún momento de la madrugada mi teléfono sonaba constantemente. Con pesadez lo tomé, pude ver el nombre en la pantalla, Niall.

-Hola princesa.

-¿Qué pasa Nialler? ¿Sabes qué hora es?

-No lo sé… ¿Qué hora es?

-Yo tampoco sé- contesto y se ríe- pero debe ser tarde.

-Bien, entonces dame las llaves de mi casa para que pueda ir a dormir.

-Oh, es verdad, lo siento Nialler, enseguida bajo.

Colgamos el teléfono y lo último que escucho es su risa. Busco en mi pantalón las llaves de su casa y tomo mi sudadera de “Oxford” para cubrir mis pechos, los cuales solo estaban cubiertos por la delgada tela de mi blusa de pijamas. Al abrir la puerta el viento frío característico de Londres azota mi piel, muero de frio y agradezco haberme puesto mi tenis antes de bajar.

Niall está dentro de su coche mirando a mí, dejo la puerta de la casa abierta y corro a entrar a su Range Rover negra para cubrirme del frio, el me envuelve en sus brazos en un abrazo y me pregunto si está borracho.

-Hola preciosa, incluso en pijamas te ves hermosa.- dice separándose de mi pero dejando sus manos en mis hombros.

-Hey, Nialler- contesto un poco incomoda- Eres muy dulce- sonrío y él me sonríe de vuelta.- Aquí están tus llaves.

Coloco sus llaves en su mano izquierda y me las mete en el bolsillo trasero de su pantalón.

-Gracias _______.... ¿Cómo estás?- puedo sentirlo real y sinceramente preocupado por mí.

In Love 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora