Submersus

Capítulo 5: ¿Tú otra vez?

El suave viento chocó contra mi cuerpo. Cerré los ojos para que la tierra o alguna otra cosa no entrara en estos.

Coloqué mis manos en el rostro y suspiré.

Después de haber corrido kilómetros hasta asegurarme de que los había perdido de vista, llegué a una banca de madera vieja. Por alguna extraña razón no habían personas habitando los edificios ni casas que habían a mi al rededor.

No quería entrar en ninguna. Tal vez hay cámaras dentro de aquellos hogares abandonados.

O tal vez sea algo paranoica.

Así que en vez de entrar a una casa o a algún edificio, decidí tirarme en aquel banco y me arrepiento de esa decisión ya que ahora me duele a horrores la espalda.

Me senté nuevamente, pasaba mis manos por mis ojos, anoche no había podido reconciliar el sueño.

Me quedé mirando mis zapatos. Debí pensar mejor en este plan de escapar.

Ahora no sé a dónde ir, muero de hambre y corro el riesgo de que me encuentren y aunque suene ilógico... esa es la peor opción. 

Algo me sacó de mis arrepentidos pensamientos.

Miré a los lados, no había nada.

Tal vez solo fue un animal inofensivo.

-Adeline, querida- los animales no hablan. Subí la mirada. los mismos tipos que de los que anteriormente había logrado escapar pero esta vez habían como quince hombres más -¿Que acaso no tienes modales?- 

Lo miraba pero no hablaba. Prefería guardar silencio a meter la pata, sabía que lo que yo le dijese a este tipo, él se lo repetiría a mi madre y padre con exageración

-Si estas planeando escapar, déjame decirte que no lo lograrás.

Quería escapar. Pero sabía que de una u otra forma me atraparían. Siempre lo hacen.

-Nunca escapé. Sé que no podría hacerlo- hablé por primera vez.

-Bien dicho. Al fin lo aceptas- le hizo un ademán de manos a sus hombres seguido de un leve silbido. unos cinco hombres se me acercaron, dos iban delante y los tres restantes atrás.

Yo solo miraba al suelo. 

Y como si yo hubiese cometido un crimen, alguno de los tipos me toma de la cabeza con una de sus manos y me tira al auto sin compasión alguna.

Cerraron la puerta y encendieron el motor. 

-Próximo destino...- lo interrumpí.

-No lo digas.

-Si lo digo igual terminaras de la forma que no quieres- el auto comenzó a moverse.

Mi cabeza estaba apoyada en el cristal; las casas o cualquier otra cosa que pudiera haber en una ciudad, exceptuando a las personas, pasaban rápidamente.

Después de unos minutos decidí hablar para romper la tensión.

-¿Qué le pasó a la gente de este lugar?

-¿De qué hablas?- se hizo el confundido.

-¿Por qué no hay gente en este pueblo?- lo miré, se notaba nervioso.

-Ah, mm, ellos... fueron evacuados- arqueé una ceja.

-¿Por qué?

-Temas que no son de tu incumbencia.

-Seré la futura princesa- por primera vez, me dio gusto pronunciar aquellas palabras -Tienes que responder a lo que diga- sonreí satisfecha; al fin este tema me servía.

Murmuró algo.

-Tú misma lo dijiste, seras princesa no reina.

-Sigo teniendo mas poder que tú. Tienes que responder a lo que diga.

-No, no eres superior a mí, niñata.

-Tienes razón, no soy superior a ti. Pero mis padres si- reté.

Él me observó frunciendo los labios a tal punto que creí que sangrarían, pero no, lo único que hizo fue apartar la mirada y volverla al camino. Pensé en mi niñez; me concentré en mis hermanos, ellos no habían cambiado. Pero yo sí. 

En los últimos años me volví otra persona, siempre le eché la culpa a las presiones que me aplicaban y a mis padres, pero no es así, era por mí y solo por mí que cambié, y lo sigue siendo. Me doy cuenta de que todo lo que me pasa, sea bueno o malo, es mi culpa, de nadie más.

Cuando era pequeña lo único que hacía era obedecer, y ahora mírame; a punto de faltar a la ley, una ley que mi familia impuso.

Lo sentimos!
Sentimos que sea taaan corto y no haber publicado en meses.
Pero no tenemos internet, la verdad incluso tenemos la idea de que escribir.
Incluso ya tenemos parte para el final!
Pero no tenemos como escribir, corregir errores y publicar.

Lo sentimos mucho.

Trataremos de hacer lo posible por actualizar.

-Drew y lena.