La Noche Que Dijimos Si

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Atravesé meticulosamente los pasillos de la preparatoria, evitando a cualquier persona, contacto visual o charla que se me atravesara. Desde que salí de la cancha de basquet hasta el baño tuve la cabeza baja, aunque realmente nadie notó la diferencia, usualmente así estaba.
Al momento que llegué al baño, caminé hacia los lavabos y me enjuagué la cara.

¿Qué te pasa? Vamos...

Después caminé hacia la dispensadora de papel y tomé tres toallas de papel, me sequé la cara y me miré al espejo haciendo caso omiso de las cosas que en él estaban escrito, como: Puto el que lo lea, o Joto, o dibujos de penes exagerados.

Si, exacto, nada más y nada menos que el baño de hombres.

Después de que tardara así unos segundos caminé hacia la puerta del baño, de nuevo bajé la cabeza y metí mis manos en los bolsillos de mis viejos jeans. Iba viendo el suelo cuando choque contra alguien, en seguida levanté la cabeza e iba a pedir disculpas pero me quedé sin palabras cuando vi que había chocado contra Kyle.

—Lo...la...men...to —dije tartamudeando.

—Descuida —dijo mientras me mostraba una media sonrisa.

Entonces volteé a mi alrededor y me di cuenta que la gente se había juntado alrededor de nosotros y no sabía porque.

Ay no... Ahora que pasa...

Kyle se dio cuenta de lo mismo después de unos segundos y al igual que yo miro hacia todas las direcciones.

—¿Qué pasa? —me preguntó en voz baja.

Yo no dije nada, pero sentía como mi rostro volvía a calentarse.

Entonces me di cuenta que no específicamente nos miraban a mí y a Kyle, sino que miraban lo que había sobre nosotros. Volteé al techo y vi una gran masa viscosa pegada al techo que estaba apunto de despegarse, entonces regresé mi mirada a la manada de adolescentes y me di cuenta que Leila estaba en primera fila.

Mierda... Joder... Mierda...

¿Recuerdan la parte de "tal vez necesite tiempo para planear algo realmente malo que lo haga retorcerse y decirse a sí mismo —: ¡¿Por qué?! ¿Por qué no acepté a Leila para ir al baile con ella?"? Bueno pues, creo que le tomó  simplemente unos minutos hacerlo...

—Sonrían para la cámara —oí decir a Leila y al instante cubrí mi rostro con mi sudadera.

Segundos después algo viscoso y húmedo cayó sobre mí, empapándome la sudadera por completo.

El lugar se llenó de risas al instante, entonces levanté despacio mi rostro y vi que lo que me había caído eran toallas de papel mojado con restos de comida y algo verde viscoso, que había manchado no sólo a mí, sino también la parte de enfrente del cuerpo de Kyle.

—Jajaja —Leila rió—. Tontos.

Y después de eso la gente tomó algunas fotos y se esparció nuevamente a hacer sus cosas habituales.

—Mierda —susurré tratando de quitarme los pedazos de toalla de papel grandes del cuerpo.

Me sentía enojado, ya no me importaba si estaba frente a Kyle, ya no me importaba que me viera así, simplemente quería volver a estar seco.

Volteé hacia el pasillo y vi a Trina y a Jay corriendo hacia mí.

—Ya es casi hora de la siguiente clase y venimos a verte —dijo Jay mientras se acercaba a mí.

—Ughh —Trina comentó viéndome—, eso no se ve bien.

—¿Tú crees? —pregunté sarcásticamente.