Historias De Un Mundo Paralelo

Capítulo 02 - Pedazos De Cristal

Pensar

Aunque quisiera, no creo en el amor, es solo una enfermedad mental que te obliga a permanecer obsesionado a crear poemas y regalarle chocolates a una persona a la cual ni si quiera conoces, simplemente te vuelves un psicópata, muchos dirían que es tierno proteger a una persona, pero el mundo es egoísta, tu protegerías a alguien por que le tienes afecto, y si le pasará algo te dañaría a ti, tu sólo amas por tu propio bien, y es que el mundo es contradictorio, por que nadie ayuda a quien no le importa...

Otra vez me cagaba la cabeza al pensar en aquello, estaba saliendo de el mall y gracias al rostro de Kim me pase el rollo del amor...
No, eso fue simple atracción, no creo en el amor, tampoco en la amistad, son una mierda de la buena. Necesitaba un lugar donde ir, me sentía perdido, pero ya no era una nueva sensación, más bien era normal en mi sentirme así, y como todo el mundo lo sabe, nada vuelve a ser como antes... No lo sé... dentro de mi sonaba una canción, me hacía sentir bien... era de Nirvana y decía algo así...

I'm worse at what I do best
And for this gift I feel blessed
(Soy malo haciendo
lo que hago mejor
y por este don
me siento afortunado)

Me gustaba sentir esta canción en mi mente... supongo que es mejor que pensar. No necesitaba a nadie, no hacía falta, no soy aquellas personas que buscan sostenerse en algo para así...

-¡Hey chico!, tienes que tener cuidado si vas por aquel lugar, están realizando una marcha estudiantil

No conocía a aquel tipo, me había alejado completamente de la realidad al pensar, supe distinguir que me estaba advirtiendo sobre algo

-¡Muchas Gracias!- conteste fingiendo una leve sonrisa sin cambiar el rumbo hacia donde me dirigía, mi ropa solía estar un poco más seca, al igual que mi pelo, no se como, pero era un leve alivio para mí, el día se seguía presentando nublado y en ese momento había menos gente que al momento en que me desperté.

03

Siguió caminando como si nada le importara, las calles que en la noche anterior se visualizaban solitarias, hoy se veían llenas de vida, pensaba en como poder integrarse en aquella sociedad.

Volteó la cuadra y observo lo que aquel sujeto le había advertido, una multitud de estudiantes realizaban una marcha, pudo observar la postura de cada uno de ellos, o por lo menos los que logró ver, muchos de ellos utilizaban el uniforme de sus establecimientos, y otros utilizaban disfraces como si de una fiesta se tratara, logro captar su atención algunos de los carteles que levantaban los de la marcha, cosas como "Kiero estudiar lo ke yo kiera, no lo ke me ofrezca el país", "Pienso luego estudio", "La educación es un derecho, y la obligación es hacerla tal cual es", "Educación gratuita", llenaban el alma de las calles en las que transitaban los marchantes y de los espectadores que localizaban el sentido de aquello; pero a el no le importó, pensó que intentando la mierda que se hiciera, nada cambiaría.

Sentía la obligación de cruzar la calle, sin razón alguna sintió aquella sensación, así que paso rápidamente entre la marcha intentando pasar desapercibido, logró hacerlo, y luego continuó caminando, aún sin saber donde encontraría su destino, o por lo menos un lugar donde lo acogieran.

Sin que mucho tiempo pasara se encontró a una persona en medio de una feria, la cualidad de ésta era que se encontraba tocando guitarra, una dulce pero desgarrada voz salía de su garganta mientras la guitarra solía hacer el resto de la melodía, se sorprendió de su pequeño talento y se paró frente a él, no conocía las canciones que tocaba, quizás eran invenciones de él, pero sin duda no podía negar la existencia de admiración al mirar a aquel chico.