Te Debo Una Disculpa.

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Kendall siempre fue una niña envidiosa y engreida. Le gustaba mucho molestar a sus compañeros de clase y hacer sentir inferior a la otras niñas de su clase. Desde el primer día que puso un pie en aquella escuela, ella sabía que todo ahí giraria sobre ella. Kendall es una niña muy inteligente y sabe como hacer perfectamente sentir mal a todas las niñas de su salón con tan solo una mirada, pero también sabia muy bien como dominar aún niño sin hacer mucho al respecto. Y todo eso lo aprendió de su madre y hermanas.

A sus cortos seis años de edad ella ya sabía más de lo debido. No creía en el hada de los dientes y mucho menos creía en santo clouse. A simple vista parecia una tierna e inocente niña, podría engañar facilmente a cualquier persona pero al profesor Rodríguez no. Él sabía de memoria todos y cada unos de los juegos tramposos de aquella chiquilla mal criada, se sabia de memoria todas sus jugadas.

Él sabia muy bien que con Kendall Jenner debía tener cuidado, de hecho la mayoria de las bromas en las que había caído eran planeadas por esta, sin embargo ya no hacia nada al respecto pues los padres de la pelinegra siempre lograban sobornar al director de la escuela y actuaban como si nada hubiese pasado.

Por eso esa mañana ya no se sorprendió ni molesto al encontrar restos de pescado crudo en su escritorio. Así que simplemente tomo un trapo limpio que siempre llevaba consigo para limpiar el desastre y continuar con su clase como si nada hubiese pasado. Pero claro eso no quería decir que la niña saldria limpia de esta, ¡oh! Claro que no, ella recibiria su castigo, eso si. Aún que claro estaba que ella no lo habría hecho sola, y ¿Quien más en el salón es tan fastidioso como ella? Exacto, Louis Tomlinson.

Mientras revisaba los ejercicios en los cuadernos de sus alumnos, estos corrian y gritaban por todo el salón. Bien podría él usar su voz fuerte y hacer que todo estuviera en orden, pero prefería concentrarse y pensar en el castigo que pondría a Kendall y Louis.

- ¡Profe! ¡Stuart tiro mi lunch a la basura!.

Aparto la vista del cuaderno que revisaba solo para encontrarse con Bryan, el niño chismoso del salón.

Soltó un bufido cansado. - Stuart devuelve su lunch o no saldras al recreo.

El niño rápidamente corrió hacia el cesto de basura para sacar de ahí la lonchera de su compañero, la cual devolvió al instante y volvió a su lugar buscando a alguien más a quien molestar. Rodriguez negó con la cabeza y volvió a concentrarse en su trabajo.

Todos los ejercicios en aquella libreta estaban bien resueltos, leyó el nombre de esta encontrandose con que esta pertenecía a Niall Horan.

Busco con la mirada a dicho niños el cual sabia perfectamente que el día de ayer no había asistido a clases. Lo encontró charlando animadamente con uno de sus compañeros. Sin duda Niall es uno de los niños más simpáticos e inteligentes del salón.

A la hora de entregar cuadernos todos los niños estaban tranquilos e impacientes por saber si en su cuaderno el profesor dibujo una carita feliz o triste, aún que claro todos esperaban la feliz sin embargo no todos la con seguían.

Cuando termino no todos los niños estaban conformes con su resultado.

Niall tenia un 10 alado de una carita feliz.

Harry tenia un 9 alado de una carita feliz.

Kendall tenia un 3 alado de una carita triste.

Louis, Zayn y Liam tenia un 7 alado de una carita no feliz pero tampoco triste, junto aún pequeño letrero en rojo que decía: Esfuerzate y la próxima no copies, que puedes lograrlo. Estaba más que claro que entre los tres se copiaron.

El Niño De Los Rizos De Chocolate  | Larry Stylinson, Ziall, LiamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora