Déjame Ser Tu Gato (COMPLETADA)

El Problema Que Se Avecina

El día cuatro,  un día para que la muchacha se confiese, fue exactamente como los demás ;en el día todo pasaba normal ,charlaba con Alya y en la noche tenía la visita de su amado al cual pronto correspondería a sus sentimientos. 
 Ahora, actualmente era muy tarde, de noche para ser breves, las..once y media de la estrellada y poco nublada noche en París..,una joven de cabello azabache y ojos tono lapis lazuli ,hablaba algo nerviosa con su adversario el cual se le confesaría lo más pronto posible, sabía que sus sentimientos eran correspondidos,después de todo ella correspondería a los sentimientos del famoso héroe Chat Noir ,pero.. ¿y si se cansaba de ella? ¿y si le tomaría como traicionera o mentirosa al mostrar su identidad como LadyBug? Esas dudas inquietantes rondaban por su cabeza sin más. Los minutos seguían pasando con total normalidad pero de forma tortuosa para Marinette hasta que por fin..Las doce se dieron a marcar, Chat Noir ya se estaría yendo del balcón de la joven, hacía frío y no quería retenerla más afuera, podría resfriarse.Ya parado en el balcón y dispuesto a irse de un salto, una mano lo detuvo, era la delicada mano de su princesa completamente nerviosa y que se tornaba de rojo vivo de a poco hasta llegar a un tono carmesí. El rubio de ojos esmeralda solo pudo enternecerse con tal acción mientras que la muchacha pensaba que estaba haciendo el ridículo poniéndose roja de tal forma involuntariamente y que estaba por hacer algo sumamente imprudente.

—Chat yo..Te responderé.

Dijo con mirada firme Marinette completamente dispuesta,pero más roja que nada. En sus ojos se podía reflejar un bello destello azulado y las estrellas reflejándose en sus ojos al igual que el rostro sorprendido del héroe, amaba eso de la joven..

—¿Responderme...exactamente qué?

Preguntó un poco desconcertado y confundido, a pesar de esperar ese fin de semana tan ansiosamente se había olvidado, él..podía ser realmente tonto y despistado. Esa consulta hizo solo que las cosas sean aún más complejas para la azabache que se aferraba al látex de su traje.

—¡Chat Noir..yo..! 

Exclamó rompiendo el incómodo silencio...Todo parecía tan perfecto y así iba a ser.

—¡Chat Noir tú..! ¡¡yo..!! ¡TE AMO! 

Sus tartamudeos casi arruinan todo,pero pudo manejarlo, no perfectamente pero ese manejo bastó para que se pueda confesar claramente. La expresión repentina de Chat sólo podía demostrar felicidad pura y real, su sonrojo no hacía más que extenderse de a poco, estaba muy efusivo debido a esa respuesta, ni él mismo lograba creérselo.

—¡Princesa..! no..¡MI Princesa! 

Exclamó parándose nuevamente en el suelo del balcón ajeno , para luego ir alzándola y girándola por todas partes con cuidado de no golpear nada, finalmente..alguien después de su madre lo amaba como tanto él había soñado. Paró de girarla para mirarla fijamente a los ojos con una sonrisa muy simpática ,sostuvo las pálidas mejillas como la nieve de Marinette y se dispuso a besarla, pero un llamado de atención con voz muy familiar hizo que ambos se desesperaran.

—¿¡Marinette!?

Se preguntaba en tono bastante fuerte la voz delicada y familiar de su madre, fue ahí cuando reaccionaron de su momento de amor, resulta que ambos padres de la de orbes azules dormían y estos habían hecho mucho barullo despertándolos sin la intención.

—¡Demonios..! 

Gruño Marinette con una expresión que demostraba preocupación ,luego susurro en voz baja "Solo uno pequeño" y le plantó un pico a los labios del encantado caballero de negro que se quedo hechizado por aquel beso esbozando una sonrisa tonta y vaga.
 Al instante cerró la puerta de su ventana apurada pero silenciosamente o sin hacer mucho escándalo ,se acostó sin cambiarse y se tapo a la velocidad de un rayo, ahí ,su madre abrió la puerta del suelo de la habitación y a encontrarla dormida se calmó.

—A de ser solo mi imaginación..

Dijo en voz baja, volviendo a bajar las escaleras más calmada, suponía  haber escuchado un trozo de conversación amorosa, pero nada que malinterpretar.
 Los celos invadían a un joven que sólo había pasado por allí patrullando como el había dicho su "sabiondo" kwami para empezar antes de entrar a la acción. Sus esperanzas de tener una relación con Marinette,su amiga de la infancia, las había arruinado un simple gato callejero.

_____________________________________________________________________

Y bueno..eso es todo! Lamento la tardanza del día de hoy, me había olvidado de actualizar el viernes, pero bueno..Próxima parte, próximo viernes!