¿Es un trato?

308 27 12
                                    

De acuerdo, entiendo completamente que necesitaba "tiempo" para pensar mi propuesta, pero es que ¡ya habían pasado dos semanas y ni una sola miserable señal de vida!. ¿Cuándo de dignaría en responder?, porque sí, estoy completamente seguro de que aceptará.

- En fin... - dije en voz alta mientras me agachaba para amarrar los cordones de mis zapatillas.

Sí seguía en casa esperando la llamada me volvería loco, correría un rato.

~~~~~~~~

Más o menos una hora después volví a casa totalmente empapado en sudor; tome la botella que había dejado sobre la mesa y me tiré sobre el sofá, me giré y como pude comencé a beber todo el líquido.

El celular sonó y me levanté tan rápidamente que parecía que el sofá  me estuviese dando choques eléctricos. Miré la pantalla, número desconocido, debía ser ella. Inhale hondo intentando controlar mi respiración, además no quería contestar muy rápido y que supiera que la esperaba, tras unos segundos contesté.

-¿Diga?
-Hola, Zack - escuche la suave voz de Leonor tras el auricular del celular
-Buenas noches, Leonor - conteste con una sonrisa en los labios y creo que se notaba en mi tono también- Así que te has decidido
-No del todo, en realidad- respondió y mi ceño se frunció - Pero me tienes bastante sorprendida y necesite llamarte para preguntar cómo
-¿cómo qué?
-¿cómo lo lograste?, desaparecer completamente, ¡no están ni tus jodidas huellas dactilares en ningún registro! - mi cuerpo entero se puso en estado de alerta, ¿me estuvo investigando todo este tiempo? ¿Pero de donde sacaría mis huellas...?... Mierda, el papel en el que anote todo, se lo dejé; nota mental, no confiar ni lo más mínimo en esa mujer.
-Te lo dije - conteste con un tono despreocupado, completamente opuesto a como me sentía.
-Si, pero por favor, ¿creías que me lo creería así sin más?, necesitaba comprobar que no eras un charlatán... Y si no lo eras por lo menos esperaba encontrar algo que confirmara quien eres; pero nada, no encontré ni lo más mínimo...
-Tengo contactos, bastantes - dije seriamente - ¿aceptarás mi oferta?
-Puedes ser un agente, muy probable, explicaría lo de tus huellas bastante bien - Leonor hablaba con un tono que nunca antes le había escuchado, casi entretenida, entusiasmada.
-Si, todo lo que digas - exhale - no encontrarás nada de mí por mucho que busques, así que ¿aceptarás o no? - respondí tentando un poco mi suerte.
-Hay algunos trabajos que personalmente me llaman la atención, aunque debo advertirte que la desconfianza hará que cobre más de lo que normalmente lo hago - paso un segundo, como esperando una respuesta de mi parte- ¿hay problema con eso?
-Me gustaría recibir una lista con los trabajos que sí aceptarías y el precio por ellos - bien, estábamos progresando.
-Te la envío apenas terminemos está conversación, ¿tu mail...?
-Por un mensaje de texto, a este número - corte por lo sano, cualquier dato extra que le diese podría ser fatal; sabía que no había forma de que me descubriera, pero ser precavido no estaba de más, no volvería a subestimarla - Si no es mucha la molestia.
-Y aunque lo fuese dudo que me dieras algún contacto a demás de este número, ¿no? - sentí la sonrisa en su voz y esto me hizo sonreír también.
-Exactamente.
-Pues, no hay otro modo; te envío la lista en unos minutos.
-La esperaré, Leonor - contesté y di por finalizada la conversación.

Con un sentimiento de victoria me fui a mi habitación , me eché sobre la cama y después de tomarme lo que quedaba de agua en la botella me dormí sin querer.

~~~

« Demasiado oscuro... Estaba en una habitación, no, era mucho más grande, parecía una bodega, la iluminación era escasa, la mitad venía de unas ampolletas gastadas y la otra parte de la luz de la luna que se colaba por las ventanas que habían en la parte superior de las paredes. El frío me estaría helando hasta los huesos de no haber tenido todo el cuerpo tan magullado como para sentir casi únicamente dolor. Pero había algo más importante, algo que se anteponía al dolor, que gritaba en mi mente, un pensamiento: "No puedo dudar, no tengo tiempo..."

Entre TratosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora