Nací con mariposas negras en lo más recóndito de lo que parece y no se ve.
Caminaba en tinieblas ácidas con la esperanza de ver el cielo y destronar la burocracia a la que servía de esclavo ya hace años.
Viendo a muchos de los míos sufrir...
Seguía caminando con una misión.
Era un infierno; constantemente la agonía era un plato especial ante su excelencia.
Tanto dolor y memorias tatuadas en estrellas me hicieron fuerte pero no sensible ante bufones coronados como los supremos.
Pueblo pequeño... infierno grande solían decir y de minutos a horas las leyendas cobraron vida. Cuerpos deformes y sin ninguna gracia torturaban sueños dejándolos ya sin luz.
Pero se que se irían...
Los inviernos pueden durar un cierto tiempo pero jamás infinitos.
Infinitos como una sonrisa
Infinito los recuerdos!
Y si somos creadores de tanto ya es hora de cambiar y crear en cenizas y papel.
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Demonios sin café
PoetryLas almas no siempre son escuchadas... Eh conversado con las estrellas y me dijeron que es hora de abrir las alas y calmar a los demonios con simples versos de mi patética vida.
