Y dejó de doler... suspire atrás del volante mientras contemplaba la nada.
A veces me pregunto si sigo teniendo alma o acaso soy un zombie inerte que viaja por la vida en busca de emoción.
Perdería todos los miedos si me declama la belleza del alma.
Pero siguen sin valer el precio para tirarlos!!
Callo los mejores argumentos por que caerían en el vacío y en vano el viento se los llevaría, él no tiene clemencia.
Mientras el porcentaje es mínimo no me impresiona saber cuanto me han conocido.
Si las víboras se aniquilan ante la ironía buscaré el oscuro resplandor para descansar.
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Demonios sin café
Thơ caLas almas no siempre son escuchadas... Eh conversado con las estrellas y me dijeron que es hora de abrir las alas y calmar a los demonios con simples versos de mi patética vida.