Capítulo 7

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A la mañana siguiente estuve pensando todo el día, y no le pude prestar atención a la clase. Cuando sonó el timbre del recreo Mario estaba en la puerta de mi salón. Y yo ya tenía la desición tomada.

-Hola Mario -le dije aunque no sabía como decirle mi desición-.

-Hola Taylor -me dijo- Se que acabas de salir de una relación pero... ¿quieres ser mi novia?

-Claro, -le dije muy contenta- pero voy a salir de gira el domingo.

-Ahh -me dijo con tono triste- ¿y cuándo regresas?

-En 1 mes -le respondí-.

-Bueno, yo voy a esperar a que vuelva

-¿En serio? -le pregunté y le dí un abrazo- ¡Eres el mejor novio del mundo!

-Creo que Abigail te está esperando -me dijo y señaló hacía donde estaba Abi-.

-Si, chao.

-Chao.

Fui con Abi y le conté lo de mi gira, que Mario es mi novio y que me va a esperar..

-¿No te parece que es muy perfecto? -me preguntó- Ningún chico es así de perfecto.

-Mario lo es -le dije- Solo estás celosa.

-No estoy celosa. -me dijo- Estoy feliz por ti. Si te parece que un chico puede ser perfecto, allá tú.

Abi se fue por el pasillo y yo me quedé guardando mis libros en mi casillero y luego pensé en lo que me dijo Abi:

"¿No te parece que Mario es muy perfecto" "Ningún chico es así de perfecto"  "Si te pareve que un chico puede ser perfecto, allá tú."

Esas frases me sonaban en la cabeza todo el tiempo y ahora si estaba confundida. Nunca puedo estar feliz un día entero. Fui a casa y ví a Meredith entrando a mi cuarto y cuando la ví me recordé que me la dio Mario, ahora estaba completamente confundida.

Al día siguiente fui al colegio pero evitaba estar con toda la gente que me hacía estar confundida: Abi, Mario, Edward,...

-Te llamé en la mañana -llegó Mario y me lo dijo- ¿Por qué no contestaste?

-Estaba pensando -le respondí- Bueno, tengo que ir a clases.

-Está bien.

Fui a clases y lo primero que ví fue a Abigail. La profesora hablaba y lo que oía era:

"Mario no es como crees" "No es perfecto" "Nadie es perfecto" "Eres una estúpida, ¿pensaste que un chico perfecto se fijaría en tí? Solo quiere fama"

¡Ya no podía más! Tuve que salir corriendo, ya no podía con eso. Corrí hasta mi casa. Llegué, abrí la puerta, subí las escaleras y me puse a llorar. Luego me puse a pensar: Abi no sabía quién era Mario, y él dijo que Abigail le había dicho que estaba en la dirección. Aquí hay algo en Mario que no sé.  Quizá Abi tiene razón. Quizá Mario no es perfecto. ¡YA NO SE QUE PENSAR!

De Taylor a SwiftDonde viven las historias. Descúbrelo ahora