PROMETISTE NO IRTE

CAPÍTULO 17: LLAMADA INESPERADA

ÉL CHICO DE LA IMAGEN SERA FRANCO, EL PRIMO DE RENATA

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NARRA RENATA:

Hace tanto que no sentía los brazos de Ricardo pero hoy fue la excepción, ya había obscurecido y estaba en casa de mi mamá. El abuelo y mis hermanos tuvieron que dejarme para arreglar unas cosas en el instituto militar, se fueron dejándome sola en casa pero el abuelo prometió llamarme y estarían dentro de mas o menos un mes de regreso. No dejaba de pensar en Ricardo, después de que el me separara de su cuerpo sentí que estaba sonrojada pero Magia me robo el corazón al hacerme esa promesa, fue muy gentil de su parte y se que lo hace para que yo me sienta mejor pero solo eso, él nunca me veria de otra forma mas que con la lastima que me a visto desde que paso el incidente con mis hermanos. No podía ir a dormir con mi papá ya que el abuelo dejo a unos chicos militares a cargo de mi, sentía que tenia nanas cuidándome, ellos estarían en la entrada de la casa vigilando y me llevarían al colegio en la camioneta que mis hermanos habían traído. Solo tenia permitido salir en las tardes y ellos me llevarían

-Creo que el abuelo esta exagerando un poco- había llamado a mi papá para contarle que el abuelo no estaba

-Mi pequeña, lo que tu abuelo hace es para protegerte- se escuchaba deprimido, me daba tristeza que estuviera solo

-Papi lo invito a desayunar mañana- dije tratando de olvidar el tema para que no siguiera triste

-Acepto pero siempre y cuando te ayude a cocinar- escuche su sonrisa y eso me hacia sentir mejor

-Perfecto, hasta mañana entonces y descanse- colgué antes de recibir su respuesta

Me asome por mi balcón para ver a los jóvenes que custodiaban la casa, eran 5 pero entre ellos estaba un joven que llamo mi atención. Su cara se me hacia familiar pero no recordaba donde lo había visto, ya eran las 12 am y no podía dormir así que decidí preparar café, no seria descortés y les invitaría a los cadetes que custodiaban la casa aunque se que es su trabajo porque se los ordeno mi abuelo, me daba tristeza porque no sabría como le harían para dormir o incluso donde dormirían. Abrí la puerta, temerosa a su reacción pero solo les ofrecería café hace frio afuera ya que esta por terminar el otoño

-Buenos días señores- hable lo mas tranquila, los 5 jóvenes que estaban custodiando me miraron directamente, 3 de ellos tenían el cabello negro y también sus ojos a excepción de uno que tenia los ojos verdes obscuro, los otros 2 tenían el cabello café claro y ojos cafés. Todos ellos tenían facciones duras

-Buenos días señorita- me dijeron todos al mismo tiempo

-¿Se le ofrece algo?- me pregunto un joven que tenia cabello negro y ojos negros él cual tuvo el problema con Raúl y Damián, que si mal no recuerdo se llama Bairon

-Nada señor- sonreí- Vine a ofrecerles café- ellos me veían como si se hubieran sorprendido

-Estamos aquí para cuidar de usted- hablo el joven de ojos verdes, tenia algo familiar pero no recordaba donde lo había visto- No lo tome a mal pero no queremos problemas con el coronel- se que tenia razón pero me sentía mal que ellos pasaran la noche fuera de mi casa muriéndose de frio y yo estuviera de lo mas cómoda

-Y no tendrán problemas caballeros- todos me miraban asombrados- Por favor se que lo que están haciendo no es parte de sus labores y si lo hacen es por ordenes del coronel. Solo por favor.....- me sentía culpable porque estoy completamente segura que lo que menos quieren es estar cuidando a una niña mimada, aunque yo no soy así pero se que tendrán esas ideas por como mi abuelo me consiente