En un lugar antaño, donde seres que para el hombre hoy en día no conocen, en éstas historias realidad se harán por medio de mi imaginación.
Dime querido/a lector, ¿alguna vez has imaginado un mundo en dónde la fantasía y lo medieval se junte, en dónde tú mismo recorres tu senda? En esta historia que te contaré, te contaré una de las 3 sendas.
'LA SENDA DEL BRUJO'.
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Te diré algo que espero que pienses mucho, ¿si tuvieras la oportunidad de vivir en un mundo de fantasía y criaturas que harían vomitar a una cabra o dar miedo hasta al hombre más rudo y valiente de la tierra, merecía la pena vivir? Te contaré las aventuras de un Brujo, si como lees, un brujo. Pero no cualquiera, si no la de uno de los últimos en la tierra y más reconocidos entre todos ellos. Su nombre es Geralt de Rivia.
Recuerda ese nombre, tendrás que admirar sus alabanzas después de sus aventuras transmitidas por este querido "yo". ¿Estoy tardando en contarte las aventuras de nuestro brujo, cierto? Bueno, tus deseos son órdenes, comenzamos la aventura de Geralt de Rivia.
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Era una mañana soleada, los rayos de sol pegaban en las ventanas de una pequeña casa, situada en Liderstan, lugar en donde se reunían grandes nobles de las Cortes más prestigiosas he importantes de los reinos por la zona. Lugar en donde el dinero movía más que el corazón de muchos pobres. Ese lugar, estaba dividido en dos clases. Alto clero junto a los nobles, caballeros y reyes. Y el bajo clero, dónde se situaban los campesinos, ciudadanos, esclavos y pobres. Las casas en donde se situaban los nobles eran mucho mejor desde fuera como interiormente al de los del bajo clero, entre una de ellas, se situaba una pequeña casa entre una tienda de armas famosa por siempre tener las primeras armas del reino y las más duras y resistentes, y un antro para bebedores o mejor dicho, taberna. Geralt, nuestro brujo iba a ese lugar con frecuencia, le gustaba beber, y mucho.
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Fuera de la casa donde vive Geralt había un gran camino de piedra en el suelo, que se usaba para caminar en ellos, como las aceras de hoy en día. Detrás de la casa, había un gran río que dividía esas casas con un bosque. Geralt vivía en los extremos de la ciudad. Se ganaba su vida como cazador de criaturas, proteger a alguien o aceptar algún trabajo para ganarse su sustento día a día. Geralt se levantó de su cama un poco más grande que el y al hacerlo, abrió los ojos lentamente expulsando por sus labios un bostezo de sueño, había hecho mucho esa noche anterior hasta ese instante. Después de vestirse y desayunar, se dirigió hacia la puerta de entrada de su hogar, y la abrió. Al hacerlo se pudo observar en los ojos amarillentos del brujo a unos pequeños jugando a perseguirse uno a otro, mercaderes comerciar con otros y unos cuantos hombres de vestimenta deteriorada molestar a un niño pequeño que estaba limpiando unas botas. Geralt al observar esa escena se dirigió a paso tranquilo hacia ellos y con voz tranquila y un poco ronca dijo mirando a uno de los tres hombres.
-Eres muy valiente contra un niño pequeño, ¿qué os ha hecho el pequeño?-Dijo el brujo ahora acercándose un poco hacia uno de los tres hombres que contestaron en un tono enojados y con cara de pocos amigos.
-¡Esto no te incumbe brujo! Mejor vete antes de que te demos una paliza.-
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Geralt simplemente esbozó una leve sonrisa en uno de los extremos de sus labios y con un simple movimiento de mano hizo que esos tres hombres se quedasen en un estado sumiso obedeciendo la orden de irse de allí, y no volver. Geralt miró por unos segundos de reojo al observar como se iban los tres hombres para dirigir su mirada hacia el pequeño que tenía también ropa muy deteriorada como los tres hombres que se fueron. Geralt preguntó al chico mirándolo a los ojos tranquilo y mirando los ojos del chico que parecían que tenía miedo ante el brujo, el brujo se agachó un poco apoyando su ante brazo en su muslo de la rodilla para mirar de nuevo al chico desde una postura más conveniente para llegar a la altura del chico.
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-¿Por qué querían esos hombres golpearte?- preguntó el brujo mientras esperó la respuesta del chico, que sólo respondió con un silencio, al parecer el chico empezó a huir. Geralt no le siguió ya que al obrar por defender al chico, no vio necesario seguirle.
Geralt se levantó apoyando su mano en su espalda y rascándose su nuca por unos segundos. Geralt empezó a caminar dando pasos normales de distancia media por el camino de piedra, observando como algunos pedían comida, otros compraban en pequeños mercados. Geralt pensó en que trabajo cogería hoy, hasta que recordó que en su bolsillo tenía un trozo de papel en donde tenía escrito en tinta negra, recoger unas plantas del bosque de las afueras de Liderstan. "2 semillas de girasol, 1 lengua de ogro y 1 planta de azufre". Eso era lo único que tenía que necesitaba Geralt para cumplir su misión. Después de unos 10 minutos consiguió salir de Liderstan y a las afueras entró en el bosque de aquel lugar donde la vegetación era extensa, y por ser una zona de grandes hectáreas, podría perderse cualquiera si no tuviese un mapa consigo mismo. Geralt entró en el bosque con un mapa en sus manos, observándolo. Después de unos minutos encontró una casa pequeña en el medio del bosque, era raro. ¿Qué hacía una casa en mitad de un bosque tan grande en donde cualquiera podía perderse? La casa por fuera estaba deteriorada, con las ventanas y puerta rota. Geralt fue a ver que pasó.
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Geralt observó la puerta rota, tenía la aldaba tirada en el suelo, como si hubiese sido arrancado a la fuerza. Ventanas rotas pero sólo por unas pequeñas partes, formando agujeros en ciertas partes de la ventana. Geralt observó todo y pensó en que podía pasar, entró en la casa y observó como todo en el interior estaba destrozado junto un cuerpo de mujer y hombre tirados en el suelo con una flecha en la frente, muy certero. La sangre que derramaron los cuerpos hicieron que se pudiese notar unas pisadas que conducían a la puerta por donde entró Geralt.
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-Vaya, reconstruyamos lo que pasó. Una ventana rota, puerta destrozada a la fuerza y cuerpos muertos. Esto ha tenido que ser obra de unos ladrones. Las ventanas no están rotas del todo, sólo por una parte. Como si fueran sido rotas por el lanzamiento de algún objeto, unas piedras quizás. La aldaba de la puerta está tirada en el suelo, como si hubieran avisado para que les abriese, al no hacerlo, arrancaron la aldaba y tiraron la puerta abajo, dos cuerpos en el suelo con flechas en la frente, es un golpe certero en la frente. Sin duda alguna, no ha sido cosa de casualidad. Esto ha tenido que ser algo más que eso.- Geralt observó algo moverse en unas mantas del suelo, junto a unas sillas encima de ellas, al acercase y quitar las sillas junto a la manta, pudo observar a una pequeña niña con signos de golpes y desnuda por completo mirando al brujo fijamente con sus ojos débiles.
¿Qué significaba todo esto?
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'La Senda Del Brujo'
FantasyGeralt de Rivia es un brujo que vivirá grandes aventuras que seguramente no te harán quitar el interés. Adelante y echa un vistazo.