'La Senda Del Brujo'

2-'La Senda Del Brujo'

Después de que Geralt encontrase aquella niña en la casa asaltada, decidió ayudarla, era una niña, Geralt no podía permitirse no atender a aquella pequeña y más si ella era familia de los fallecidos en el piso. La niña no habló, estaba paralizada por el miedo que el brujo le hacía sentir en ese mismo momento. La niña simplemente se arrodilló en el suelo, gritando de miedo, y mirando hacia las botas del Brujo, la niña estaría a punto de hacer algo que a Geralt le puso los pelos del cuerpo como escarpias. La niña se movió con sus rodillas arrastrándolas hasta las botas del Brujo, y acercó su cara a ellas para luego en segundos abrir su boca, sacar su lengua pequeña y empezar a lamer las botas del Brujo, que se quedó sorprendido al ver lo que la niña estaba haciendo en ese momento. Geralt reaccionó y dijo:

- No, tranquila, para. No quiero hacerte daño, puedes parar de lamer mis botas.- la niña hizo caso omiso a las Palabras del Brujo, el miedo la invadía he incluso, la intimidación por parte del Brujo hacia la pequeña.
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Después de unos segundos la niña paró, y el brujo se agachó apoyando su ante brazo en su rodilla que fue elevada hasta la altura de su abdomen y de un leve movimiento de brazo, el brujo dirigió su brazo y mano abierta, hacia el pelo de la niña, la cual aún seguía callada.

- No lo hagas, pequeña. No quiero hacerte daño, ahora dime qué ha pasado aquí. Y no te saltes nada.-Dijo el brujo mirando a los ojos de la pequeña la cual se levantó y apoyo su mano sucia y tambaleante en su rostro emitiendo un *sniff*. La niña comentó al brujo que su hogar fue asaltado por un hombre que tenía un aspecto aterrador, alto , musculoso, con el pelo largo que le llegaba a los hombros y junto a él, una mujer de busto grande, curvas finas y rostro perfilado y altura media. Geralt se preguntó quienes podrían ser, simplemente El brujo tenía que ayudar a la pequeña, su nombre era "Nerea".
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Al parecer Nerea había sido violada por aquel tipo que iba junto a la mujer por varios días, y golpeada por la mujer constantemente haciendo que se quedase la niña ciega de ojo derecho. "Horrible" es la palabra que dijo Geralt al escuchar las atrocidades que escuchó salir de las Palabras de la niña, Nerea.
Juntos empezaron a caminar por el gran bosque, se podía escuchar el ruido de los pájaros, lagartos posados en árboles he incluso lobos, alejados de su manada o descansando debajo de algún árbol. Nerea no miraba en todo el trayecto al Brujo Geralt, ella pensó que era malo, pero la confianza fue creciendo un poco al ver como este no le hizo daño alguno. Ya cerca de la entrada de Liderstan, Geralt pudo observar cómo un tipo con una mujer golpeaban sin cesar a una anciana.
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Geralt reaccionó al instante corriendo hacia ellos, desenvainó su espada de acero con la que únicamente hacía daño a los humanos, y en posición de combate se acercó a ellos lentamente. Adoptó una posición de esgrima, mirando a los dos fijamente a los ojos, los ojos del Brujo eran especiales, puesto que eran de color amarillos cristalinos. El brujo gritó:
- Ustedes dos, contra alguien menos fuerte podéis, alejaos he iros antes de que decida dejaros más caliente que yo repartiendo golpes.- Dijo el brujo. Pero sólo consiguió que uno de ellos se riese sin parar, la chica. El brujo se percató de que las características que le dio Nerea eran las mismas que esos dos individuos, la pequeña se escondió detrás de un carro tirado en el suelo, por miedo a lo que pasaría. Geralt pensó en su estrategia.
-Dos contra uno, musculado, alto y parece un bruto. Esa mujer parece más inteligente y parece que siempre deja al tipo pelear ya que ella quizás sea el cerebro de esos dos. Estos cabrones fueron quizás los que asaltaron la casa de la pequeña de Nerea. Bien, os dejaré un regalo de bienvenida aquí.-

El brujo esperó al ataque del tío, este corrió hacia el brujo confiado y elevando su brazo con el puño cerrado para golpear al brujo, pero en ese mismo instante, el brujo adelantó su brazo en dirección al tipo, y abrió su palma de la mano, haciendo que un impulso de aire hiciese que el tipo fuese arrojado varios metros hacia atrás cayendo casi un poco más lejos que la mujer que la acompaña. (GERALT Y ELLA-DISTANCIA: 7 metros).
"¿¡C-cómo hizo eso... acaso es un brujo!? Eran las Palabras que dijo en alto la mujer al ver como derrotó a su compañero en cuestión de segundos. La mujer miró al brujo y Sonrió.

MUJER: Eres fuerte, sin duda alguna no puedo hacer nada contra ti. Has derrotado a este cabeza hueca de un solo golpe y eso que ni lo has tocado. Mira, me presentaré antes de matarte, brujo. Mi nombre es Mónica D'elía, soy una maga de rango A. Y este que está aún en el suelo es Diego, sólo es puro músculos y poco cerebro. Los brujos me dan mucho asco, vas a tener el placer de ver como alguien como yo, te humilla.
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Después de todo lo que dijo Mónica, Geralt miró seriamente a la mujer."Lo que da asco es tu horrible geta, maga de rango A". Dijo Geralt sonriendo mientras miraba a la mujer, está se enojó por la ofensa del Brujo, y se dispuso a atacar; sin embargo Geralt desenvainó su espada de plata y guardó la otra, en la zurda la espada de plata y en la otra metió su mano en su bolsillo derecho y sacó unas semillas. Las tiró al aire y dijo:
- "Spectrarum Sepra Te"-. Esas semillas tiradas por el brujo hizo que explotasen cerca de los dos, estos se quitaron de inmediato y al hacerlo, Geralt a gran velocidad, por cuestión de segundos cortó la mano de Mónica, haciendo que esta caiga al suelo sin más poder. Era algo sanguinario, la maga cayó al suelo gritando de dolor mientras que el otro tipo, Diego cogió a la maga y huyeron de aquel lugar como si de viento se tratase. Nerea, que estaba escondida en un carro salió de su escondite, se acercó al brujo y le dijo con voz dulce y tímida.

Nerea: ¿E-esos señores se han ido?

Dijo la pequeña mirando esta vez al brujo, a los ojos. Las pupilas de la pequeña Nerea se dilataron, sus ojos estaban brillantes al ver al brujo y juntó sus manos formando un puño con ellos y miró al brujo. Parece que esta se había quedado impresionada con los dotes del Brujo al defenderse.

-Sí, se han ido. No volverán, creo. Ahora, vamos a un orfanato. Tendrás que quedarte allí.-El brujo miró a la pequeña, pero esta sólo respondió con un "no".

Nerea: No por favor señor brujo, he visto como tratan a los demás como yo allí... no quiero ser esclavizada por ellos. He perdido a mi familia, y casa. No quiero pasar el resto de mi vida sabiendo como será en un lugar cerrado para niños al exterior.

El brujo pensó en una idea, era una locura pero quizás funcionaría.
El brujo guardó su espada manchada en la punta de sangre al corte de la mano de la maga Mónica, y al hacerlo, miró a la pequeña.

- Y si...¿Hacemos esto...?