CAPITULO 36
TAEYEON
Para el momento en que había llegado a la cama de Baekhyun ya estaba llorando incontrolablemente.
El Sr. Byun le dio a mi hombro un fuerte apretón y dejó la habitación para darme un poco de privacidad. Aprecié que hubiera convencido a su esposa y me permitió venir y ver a Baekhyun.
Ahora que estaba aquí, no sabía qué hacer. Parece que no podía hacer otra cosa que llorar. Debería sostener su mano o abrazarlo o algo, pero no podía obligarme a hacer nada más que mirar.
Baekhyun ya lucía tan diferente en sólo un par de días. Su piel estaba pálida, había una sombra de rojo alrededor de sus ojos, y su aspecto era demacrado. Apenas se asemejaba al Baekhyun que siempre tenía un brillo en sus ojos.
Mi primer instinto fue huir y dejar la habitación, pero planté mis pies firmemente sobre el suelo y traté de mantenerme fuerte. Era demasiado difícil verlo así. Era difícil creer cuán rápidamente su condición había empeorado.
Mi corazón saltó un latido cuando Baekhyun comenzó a abrir sus ojos. El ambar en ellos era justo tan llamativo como siempre, pero vacíos de algún modo. Fue como si estuviera mirándome pero no realmente viéndome.
Acercándome, me incliné para estudiarlo justo cuando sus ojos se cerraban otra vez. Estaba tomando cortas respiraciones y parecía luchar con cada una.
―Taeyeon... ―pronunció mal.
Una sonrisa se extendió a través de mi cara ante el sonido de mi nombre mientras tomé su mano. No estaba segura de cuán consciente era de lo que estaba pasando, pero me alegré de que me hubiera reconocido.
―Lo siento por tomarme tanto tiempo para venir a verte ―digo, acariciando su mano y estudiando sus rasgos demacrados―. Pero ahora estoy aquí y no voy a ninguna parte.
Un fantasma de una sonrisa movió sus rasgos y esperaba que eso fuera porque me había escuchado y me entendió.
Hubo un tirón en mi mano y miré abajo con sorpresa para ver que Baekhyun estaba tirando de mí. Estaba susurrando algo, pero no podía escucharlo claramente.
Mi frente se arrugó. ¿Qué estaba tratando de decir?
Tiró de mi mano otra vez, un suave tirón que le faltaba energía. Entonces rodó sobre su costado y lo miré perpleja, porque todavía estaba sosteniéndome. Había un pequeño espacio a su lado y lo miré, comprensión floreciendo en mí.
Quería que me acostara a su lado.
Bueno, esto iba a ser complicado.
Las camas de hospital eran pequeñas y sería un poco apretado para ambos, pero si eso es lo que quería entonces no se lo negaría. Bueno, al menos eso es lo que parecía que quería. Era difícil estar segura.
Con cuidado de no mover los tubos que lo conectaban a la máquina a su lado, me subí en la cama y me acurruqué a su lado. Se dio la vuelta otra vez y colocó su brazo sobre mí. Así que supongo que estaba en lo correcto asumiendo que quería que me acostara con él después de todo.
Alargué la mano para rozar su cabello, que había crecido mucho, fuera de su cara. Odiaba verlo tan vulnerable, pero estaba esperando y rezando para que estuviera bien y que saliera de aquí. Quería tan desesperadamente que estuviera bien, para caminar a la escuela juntos en unos pocos días y reírnos de lo que había sucedido.
Sin embargo, había una parte de mí que estaba diciéndome que eso no iba a pasar. No en la condición en que estaba ahora. Quería perforar esa parte de mí y decirle que me dejara a mí y mi optimismo solos.
―Te amo ―susurré―. Y quiero que sepas que nunca dejaré esto ir. Siempre mantendré las cosas que me enseñaste. Estando contigo en este momento, estoy incluso enamorándome más. Si mi amor pudiera salvarte, vivirías para siempre.
Pensé que se movería con mis palabras, pero no hizo ningún otro movimiento para reconocer que me había escuchado. La tristeza me recorrió como una ola aplastante y apreté mi agarre en su mano mientras me acurrucaba más cerca.
Su cuerpo estaba helado, y a pesar del frío clima, sabía que eso no tenía nada que ver con su temperatura corporal. Él estaba frío porque su vida estaba abandonándolo.
Pero no quería pensar más en eso. Quería disfrutar este momento con él. Quería recordar cada detalle de su cara. Quería memorizar exactamente como se sentía su cuerpo contra el mío.
Mi único arrepentimiento era que no había venido aquí antes, que no había tenido una oportunidad para hablar con él. El Sr. Byun me había dicho que Baekhyun había estado hablando bien cuando estuvo consciente por primera vez. Odiaba que no hubiera estado aquí para verlo. Odiaba que su madre me hubiera mantenido lejos de él. Nunca la perdonaría por eso.
Pero ahora estaba aquí, y eso es todo lo que importaba, sólo estar aquí con él, teniendo una oportunidad para pasar estos preciosos momentos con él. Siendo capaz de sostener su mano y estudiar su cara y apreciar el tiempo que le quedaba.
Eso es lo único que importaba ahora.
En este momento, sosteniendo a Baekhyun tan cerca, sólo dejé a las cosas ser de la manera en que debían ser, sabiendo que justo aquí era a donde pertenecía. Baekhyun y yo no teníamos una relación complicada; era simple, honesta y pura; el tipo de pureza que sólo dos personas que han expuesto todo el uno al otro pueden compartir. No hubo decepción en nuestro amor, no había nada que lamentar. Cada momento que habíamos pasado juntos había estado lleno de felicidad, nuestro amor estaba floreciendo antes de que hubiésemos sabido lo que nos había golpeado.
No podía culparlo por estar haciéndonos esto. No era su culpa. Él no merecía lo que le estaba pasando; no merecía nada de esto. Merecía tener una larga vida, ir a la universidad, viajar, cometer errores, casarse y tener hijos. Merecía estar sano. Merecía lo básico que todos los demás tomaban por sentado... vida.
Mi cuerpo se entumeció cuando noté que Baekhyun estaba quieto todavía. No pasaba aire por su boca. Su cara estaba blanca y sus ojos no se movían debajo de sus párpados. Mi interior se convirtió en hielo, como si hubiera tragado un balde de agua congelada.
El chico que había traído tanta calidez a mi vida estaba ahora acostado a mi lado, frío, pesado, sin vida y muerto.
De repente, un lamento estalló de algún lugar alrededor de mí, un sonido tan desgarrador que nunca había escuchado nada como eso antes. Me toma unos segundos darme cuenta que el sonido provenía de mí y con eso vino otra comprensión... que había perdido a Baekhyun para siempre...
***
Pinshe vida... Ahora sí, no me toquen porque ando chida :c
Aiñ, estoy llorando carajo, no sé qué decir al respecto, solo diré que... Nos leemos en el siguiente capitulo T.T
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-. ❥ Enamorado de TaeYeon (ADAPTACIÓN)
RomanceHuyendo de su antigua vida en la ciudad de Nueva York, Byun Baekhyun termina en el pequeño Pueblo hanok de Bukchon, en Seul. No está interesado en hacer amigos o llegar a conocer a alguien. Sólo quiere mantener la cabeza baja y desaparecer entre la...