Capítulo 4 "En la misma clase"

3K 97 5
                                    

Mi alarma me despertó, no me quería levantar pero debía sino Ana me matará, no entiendo la idea de llegar chorrocientas horas antes, a veces ni los profes han llegado, en fin, me ire a duchar para poder despertar y relajarme un poco. 

A: Hija ya está listo el desayuno, apurate!

N: Ma, ya voy, estoy terminando de secar mi pelo!

A: Bueno pero apurate, se nos hace tarde!

N: Mamá son las 7:15 A-M ES MUY TEMPRANO!

A: Hija debes llegar antes, eso demuestra responsabilidad de parte tuya y de tu madre!

N: Okay!

No se puede luchar con las madres, siempre tendrán la razón y siempre los hijos terminamos perdiendo, terminare de secarme el pelo para ir a desayunar o sino seguiremos gritando de un lado a otro y terminare siendo regañada.

A: Nina apurate en desayunar, viste que o sino llegaras tarde, además debes ir a cepillar tus dientes aún.

N: Si ma, ya lo se, pero si me sigues hablando no podré masticar ni tragar mi comida como tu quiere.

A: Está bien, pero apurate, iré a buscar unas carpetas y mi bolso, vengo altiro.

Esto de tragar no es nada provechoso para mi sistema digestivo, después me espera un dolor de estómago inmenso por lo deglutir bien el desayuno y mi mamá será la culpable. Termine al fin, me lave los dientes y ya estaba lista con mi bolso en el auto esperando a Ana.

A: Listo, ya está.

N: Y era yo la que se estaba "demorando".

A: Ay hija, es que me llamó un cliente y necesita de mi abogacía, lo siento.

N: Esta bien, bueno ya vamos.

Y nos fuimos, mi madre me hablaba y hablaba y hablaba, pero yo iba sumida en mis pensamientos mirando por la ventana.

A: Nina a ti te ocurre algo, y no me digas que no, aunque ayer no te pregunte nada, soy tu madre y si note que llegaste extraña y ahora, ahora te hablo y ni me pescas, sabes que puedes contarme las cosas, no dejes guardar sentimientos que no hacen bien para tu corazón o para tu mente, a veces te pueden jugar muy chueco.

N: ¿A? Mamá, es que a una amiga la tratan mal, y me siento muy mal por no poder hacer algo por ella, me tiene preocupada, a parte más encima, la novia del chico que le gusta le hace la vida imposible a ella.

A: Pobresita tu amiga, deberias ayudarla, aunque sea en lo más mínimo, lo pequeño hace la diferencia, si ves que la están molestando, ayudala, defiendela, dos pueden contra una, y bueno si son más busca ayuda con los profesores, adultos que puedan estar cerca, pero es tu amiga y debes apoyarla, si quieres la puedes invitar a casa y yo puedo conversar con ella o pueda hablar con sus padres para que estén al tanto y la puedan ayudar.

N: ¡NO! A casa no, no puede, pero tomare tu consejo, oh, mira ya llegamos, chau ma, que tengas un lindo dia, ¡adios!

A: Pero hija, chau.

Trate de irme lo más rápido, no quería que se enterara que esa "amiga" era yo, y si seguía ahí me haría más preguntas, cosa que no quería. Estaba en mi casillero ya, y de lejos venía una sonriente y alegre Luna Valente, literalmente se tiró arriba mio para abrazarme.

L: Amiga, no te ví ayer en el Jam and Roller, ¿Fuiste?, si fuiste, porque no me fuiste a ver a la pista, estaba trabajando, no podía salir.

N: Si fui pero estuve leyendo todo el rato, lo siento por no haberte ido a ver.

Gastina- Cómo pudo ser PosibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora