CAÍDOS DEL MAPA 12 (Fanfic, TERMINADA)

Pizza

En lo que restó de la semana, el chico de negro no apareció, y los cuatro amigos continuaron saliendo todos los días a distintos lugares: un día con las bicis, otro caminando y también fueron a visitar un museo al que los llevó la mamá de Paula. Debido a eso, ni Graciela ni Federico dijeron nada, para no alarmar a los demás sin razón.
Un día, los papás de Graciela les informaron a ella y a su hermano que se irían unos días a una ciudad cercana a descansar solos unos días. Lucas insistió en ir con ellos, pero cuando se dio cuenta de que era inútil dijo que se iría a lo de un amigo. Esto le dio a Graciela la excelente idea de invitar a los chicos a dormir unos días, como un pijama party pero más largo. Luego de que sus papás le dijeran que no había problema mientras no tiraran abajo la casa, corrió al teléfono y llamó a Paula
- Holaa!!
- Gra?
- Sip. Te llamo para preguntarte si querés venir con los chicos a dormir unos días. Se van mis viejos y mi hermano!!
- Wow! Se te nota contenta!! Obvio que voy, si mi vieja me deja...
- Uy Pau no empieces, estas grande seguro que te deja
- Si, tenés razón, le pregunto y te aviso
- Ok, chau
- Chau.
Graciela ni se gastó en llamar a los chicos, les mando un mensaje:
- Hola Fede/Fabi!! Mis viejos se van unos días y mi hermano se raja a lo de un amigo, por lo cual me quedo solaa!! Se quieren venir a dormir? Ya le dije a Paula y le va a preguntar a la mamá, que pesada no? Pero seguro viene. Se suman?
Así quedó el mensaje, que apenas 5 minutos después fué contestado.
(Fede) - Genial!! Me sumo con toda. A qué hora?
(Fabián) - Super! Obvio que voy. Llevo coca y algo para comer, está bien?
Cuando Gra vio las respuestas, corrió a llamar a Paula para contarle y quedaron en encontrarse a las tres de la tarde; después de que estuvo todo arreglado cada uno fue a preparar las cosas (las chicas kilos de ropa y los chicos una muda y alguna que otra revista).
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Riiiiiing- sonó el timbre en la casa de Graciela
Cuando fue a abrir, miró por la ventanita esperando ver a Paula y casi se cae del susto: era el chico de negro. Estaba disfrazado de repartidor de pizza, pero aun así lo reconoció enseguida. Muerta de miedo y sin saber qué hacer, cerró las puertas con todas las trabas (que eran muchas) y se escondió atrás de un sillón sintiéndose extremadamente infantil.
Riiiiiiiiing- esta vez sonó más impaciente- ¡¡Pizza!!- se oyó una voz ronca que a Graciela le dio escalofríos. Su mente iba a mil, que hacía? Finalmente y armándose de valor, Graciela contestó con voz grave y temblorosa
- Nadie ordenó pizza!
No sabía qué hacer y escuchaba los pasos impacientes del otro lado de la puerta. Cuando escuchó la voz de Fede sintió un alivio enorme pero también se asustó, y si le hacía algo?
- Que haces ahí tarado? Alguien te invito?
- Che Fede tranqui, tal vez vino a traer pizza- dijo Fabián en vos baja
- Ah si? De que pizzería sos?
- "Del Bajo"- respondió el chico
- Ah, del bajo... - la voz de Fede pareció tranquilizarse, pero enseguida volvió a la carga- No sabías que en esa pizzería el uniforme es azul y no amarillo!!?? Ya sé que sos un falsete, así que rajá de acá o sos boleta.
El chico parecía más grande que ellos, pero viendo que eran dos hizo caso y se fue corriendo. Graciela abrió la puerta y los chicos corrieron a abrazarla después de aquel susto, pero también le preguntaron cosas: si lo había visto antes, que hace cuánto tiempo, que porque no había avisado... Y entre tantas preguntas llegó Paula corriendo y hablando rápido
- Perdonen chicos que llegue tarde es que mi mamá quería preparar una torta...- y al verlos en tan extraña escena puso cara de quién se pierde algo.
Graciela suspiró, se venían las explicaciones.