Memories

Emociones

lunes, 13 de junio de 2016

Éste día no podría ser peor.

En cuanto supe que vendrías, quise marcharme lo más pronto posible.

Lo pensé porque sabía que esto no iba a acabar bien.

¿Y qué fue lo que hice?

Simplemente me fui.

No quería ver tu rostro. Ni hoy, ni mañana, ni nunca.

Tal vez fue un error, porque se supone que una persona debe enfrentarse ante cualquier situación.

Pero en mi caso, decidí hacer lo que siempre hago ante cualquier situación.

Huir.

¿Es cobardía? Probablemente sí.

Pero también lo hice porque quería evitar una pelea. No sabes lo cansado que estoy de verte pelear y decir promesas que nunca cumplirás.

De verdad, no sé cuando mi mundo estará en paz.

Quiero que te vayas. No quiero verte, por favor.

Dejame vivir en paz.

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Es sorprendente cómo una persona puede cambiar de opinión y de estado de humor, y en tan sólo unas horas.

Iba a quedarme en otra parte, con tal de que no estuviera contigo.

Una conversación con alguien me hizo abrir un poco mis ojos.

Y es que, aunque dicen que hay que saber perdonar, lo cierto es que si llego a hacerlo algún día, tardaré mucho tiempo en asimilarlo.

No será fácil. Tendrás que demostrar que de verdad te preocupas por mí y que estarás ahí para apoyarme.

Hago esto sólo porque ya no quiero estar triste. Lo he estado desde hace algunos años y es que sólo quiero ser feliz.

¿Es tanto pedir algo cómo eso?

Quiero hacer que éste día vuelva a ser tranquilo y feliz.

Estaré en mi cuarto. Aislado.

Y mientras escribo esto, quiero darte a entender que es esto es lo que me has obligado a hacer.

Has hecho de mi vida una montaña rusa, con momentos de felicidad y momentos de angustia y tristeza.

Oí que mañana te irías, también eso contribuyó a que yo decidiera volver.

Lo bueno que no asistirás a mi graduación, porque eso de verdad empeoraría las cosas.

¿Que sientes al saber que no quiero que estés en mi graduación?

Creo que estoy en una especie de laberinto de emociones.

Lo siento, es sólo que han pasado tantas cosas en tan poco tiempo, que ya no sé que pensar al respecto.

Espero ni confundirte a ti, lector.

Lo único que quisiera es que todo volviera a la normalidad, como lo estaba esta mañana.

¿Por qué suceden estás cosas?

Supongo que esto es lo que llaman: Realidad.

No lo sé, pero por ahora estaré en mi cuarto, escribiendo toneladas de palabras afligidas, escuchando canciones melancólicas, y olvidando que estoy en una realidad que no quisiera vivir.

Vaya manera de comenzar la semana.