Cap 3: Un Mal Inicio

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Dove.

Me desperté hace como una hora, mi despertador no tuvo piedad de mi, ni yo siendo sincera.
Desperté desde las dos de la mañana y no pude dormir lo que se considera bien, los nervios quizá.

Me levanté casi como un zombie, y sin una sandalia, no sé dónde está el otro par y tampoco es que tenga tiempo para buscar.
Entré al baño y me quité la ropa para después encender la ducha, estaba fría pero es lo que se necesita cuando solo dormiste una hora y es el primer día de clases en una ciudad que no conoces. Debería suicidarme con el chorro de agua, como en los animes.

Después de un rato donde estuve lamentando el no dormir, salí de la ducha buscando mi ropa. Pantalón, camisa y gorro, es buena combinación. Miré que tal se veía en el espejo. Mi ropa no es muy colorida, la mayoría de mis colores son opacos a excepción del morado, ese sí me gusta tal y como es.
Tomé mi mochila que estaba colgada en el espejo y la sacudí un poco, tenía algo de restos de pintura. Está manchada pero su color morado original con el de los otros colores combinaban bien.

Salí de mi habitación bajando las escaleras y caminé a la cocina, donde estaba Nico esperándome con la comida lista.

- buenos días - le sonreí mientras me sentaba. De los dos es quien tiene más color en el atuendo, sólo un poco.

- buenos días, pulga - contestó mientras acomodaba su flequillo y tomaba asiento junto a mi.

- ¿mamá y papá?

- trabajo - alzó los hombros mientras comía - pero dejaron una nota donde nos deseaban mucha suerte.

- sonreí levemente y asentí mientras comía un bocado - está bien.

[...]

Salir de la casa y encontrar la escuela pensé que sería algo complicado, pero el tener el gps es de mucha ayuda. Pudimos llegar a la escuela y también notar la existencia de un parque donde hay una muy buena cancha de baloncesto, el cual me gusta, así que será un buen lugar para pasar el tiempo, pero ahora lo que importaba era encontrar mi clase.

La bienvenida del director no fue muy informativa y Nico me abandonó a mi suerte, aunque no debería quejarme, él tenía que encontrar su área y salón. Como estamos en niveles educativos diferentes, aquí solamente se juntan en los casilleros y recesos, de ahí en más estamos separados.
Además, llegamos tarde.

Mire nuevamente mi hoja donde aparecía el número de la clase, había encontrado al fin los números y di con la puerta, toqué dos veces para después abrir la puerta un poco.

- parece que has llegado un poco tarde, ¿no crees? - me recibió una señora un poco joven de semblante serio.

- disculpe la tardanza, soy nueva y tarde en encontrar el aula.

- ¡oh, cierto! - sonrió mientras hacía una seña para que entrara - el director me dijo sobre ello, pero pensé que no llegarías. Como sea, preséntate con la clase y después busca un asiento.

- muy bien, me llamo Dove Cameron, nací en Nueva Yorck y he estado viviendo en muchos países y estados, actualmente vivo aquí y me mude ayer - dije conforme iba caminando a un bonito lugar en el fondo junto a la ventana.

- al parecer tenemos una nueva básica - debió haberlo dicho por mi vestimenta. Odio esa palabra.

Miré al chico levantando mi dedo pulgar hacia él mientras me sentaba, felicidades amigo.

- silencio Boobo - regañó la maestra al chico que tenía un aspecto asiático - bueno Dove, espero que te sientas cómoda - asentí mientras acomodaba mis cosas en mi lugar.

Su Historia (Dotchell) EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora